miércoles, 31 de agosto de 2022

 El talento de Mr. Ripley

He terminado de leer la magnífica novela titulada “El talento de Mr. Ripley” de la escritora Patricia Highsmith. La novela es la mejor que ha escrito esta autora. Le dio fama internacional y a partir de ella se dio a conocer en el mundo entero. La novela narra la historia de Tom Ripley, un joven que tiene un amigo, Richard Greenleaf, apodado Dickie, al cual su padre pretende hacer volver a Estados Unidos y que viva con él y su madre, por que Dickie se ha ido a Italia y no quiere regresar. Está llevando una vida de diversión allá y por eso su papá habla con su amigo Tom Ripley para que lo haga entrar en razón y que vuelva a estudiar o trabajar. Le paga 5000 dólares a Tom Ripley, así que éste viaja a Europa, busca a Dickie, lo encuentra que está de enamorado con una chica Marge Sherwood, rubia y bonita, aunque algo llenita. Vive una vida de diversión, yendo a la playa todos los días y con criados en su residencia. Le dice a Tom que no piensa casarse con esa chica, pero la estima. Tom le dice que su papá de Dickie quiere que vuelva a Estados Unidos, pero Dickie le dice que así es feliz. Tom se entera que su papá de Dickie le envía 5000 dólares mensuales para sus gastos. El papá de Dickie es rico. Un día, Tom y Dickie se van en una lancha al mar y en eso, Tom piensa que podría matar a Tom y hacerse con su plata. Porque Tom se parece mucho a Dickie, son del mismo tamaño, físicamente se parecen, solo que Dickie tiene el cabello más claro que Tom y tiene un mechon de pelo que le cae sobre parte de la cara. Así que cuando están en altamar, Tom le propone hacer una carrera de natación a Dickie. Se van quitando la ropa y de repente, Tom golpea con el remo a Dickie en la cabeza. Este queda mareado. Lo sigue golpeando, hasta que lo mata. Le sale sangre a Dickie de la cabeza. Mancha el bote. Así que Tom decide hundir el bote con el cuerpo de Dickie amarrado a un bloque de cemento que les sirve como ancla. Y lo hunde con el bote y todo. Antes, le saca el dinero y documentos a Dickie. Se va a la casa de Dickie y se agarra todo el dinero que tiene, revisa sus documentos, sus cartas que recibe. Más antes, Dickie le había presentado a un norteamericano de pelo rojo, anaranjado, llamado Freddie Miles, que lo habían encontrado cuando viajaron a Nápoles, Tom y Dickie. Dickie también usaba dos anillos de manera permanente. Uno de color verde aguamarina y otro dorado. Su papá había querido que regresara para que se encargara de manejar el astillero de la familia. Tom estaba pensando en cambiar su apariencia física, se tiñe el pelo un poco para rebajar el color. Se deja caer un mechón de pelo con forma de onda, igual que usaba Dickie. Se pone su ropa. En eso viene a visitarlo Marge. Ella lo reconoce que no es Dickie, y Tom le dice que Dickie ha ido a Nápoles. Le dice que sus intenciones de Dickie no son serias respecto a ella. Luego, ella se va. No le sorprender encontrar a Tom en casa de Dickie porque Dickie había acomodado una habitación en su casa para Tom. Pasan unos días y Marge regresa a visitar a Dickie. Tom le dice que ha salido a cenar, pero le entrega su perfume que ella le encargó comprar. Ella le agradece. Y se va. Dickie se empieza a cartear con el padre de Dickie y con otras amistades de Dickie. Lo trata de reemplazar. Viaja a Roma y allí se hace pasar por Dickie, tiene mucho dinero y lo gasta en lujos. Pero lee en los periódicos que han encontrado un bote hundido con manchas de sangre. No han encontrado cuerpos de personas, pero el que alquilaba botes contó que un par de jóvenes alquilaron su bote y no regresaron. Alquilaba varios botes. Los policías lo interrogan a Tom que se hace pasar por Dickie en Roma, sobre la desaparición del joven Tom Ripley. Este les cuenta mentiras. Luego que se van. Y justo, le visita Freddie Miles. Lo reconoce como Tom y éste le dice que Dickie ha salido esa tarde y volverá en la noche. Freddie se retira y le dice que volverá a visitar a Dickie. Pero al salir, encuentra a una vecina que le dice que el Sr. Greenleaf no ha salido de su casa en todo el día. Freddie sospecha algo y sube a hablar con Tom. Pero Tom lo golpea con un cenicero de vidrio en la cabeza varias veces hasta que lo mata. Lo oculta, y en la noche, lo lleva en su carro de Dickie hasta un lugar alejado y sin gente, donde tira su cuerpo. Decide que tiene que volver a ser Tom Ripley. Se vuelve a convertir en Tom Ripley y viaja a otra ciudad de Italia, y visita a la policía porque se ha enterado por los periódicos que lo buscan como desaparecido. Ellos le dicen que la policía de Roma habló con Dickie Greenleaf y éste había contado que lo había visto por última vez en tal fecha. Tom dice no saber nada de Dickie, solo que pensaba viajar a España. La policía le dice que sospechan que Dickie Greenleaf ha matado a Freddie Miles ya que han encontrado su cadáver en Roma, luego de que éste le visitara en su casa. Tom niega saber nada del asunto. Marge va a visitar a Tom y hace más amistad con él. Ella encuentra los dos anillos que usaba Dickie en una caja en la habitación de Tom. Tom le dice que Dickie se los dio para que se los guardara y los puso en esa caja. Luego, a Tom se le ocurre que puede escribir un testamento en un papel haciéndose pasar por Dickie, en el cual Dickie le deja su herencia a Tom Ripley, pero pide no se abra dicho sobre hasta Junio de ese año. El papá de Dickie va a visitar a Tom Ripley y encuentra a Marge. Van a comer juntos los tres y conversan sobre Dickie. Tom les dice que lo más probable es que se haya suicidado. El papá de Dickie le dice que él también contempla esa posibilidad. Les dice que ha contratado un detective norteamericano para que le ayude investigando sobre la muerte de Dickie. Vendrá al día siguiente. Y viene el detective. El papá de Dickie se los presenta a ambos y hablan sobre Dickie. El detective les va haciendo varias preguntas. Luego, pide irse a hablar a solas con Tom Ripley. Este se da cuenta que lo más probable es que ya lo ha detectado. Van a otro restaurante y piden café. Entonces Tom sabe que en cualquier momento el detective le va a poner las cartas sobre la mesa y lo va a acusar de asesinato. Mentalmente va pensando en el asesinato de Freddie, en el de Dickie, y se pone nervioso. Entonces el detective lo empieza a interrogar y … . No les puedo contar el final para que no pierdan la emoción de leer esta novela. Léanla. Es emocionante. 




miércoles, 24 de agosto de 2022

 

Las cenizas de Angela

He terminado de leer la magnífica novela titulada “Las cenizas de Angela” del escritor Frank McCourt, Premio Pulitzer, con más de 5 millones de ejemplares vendidos. La novela narra la niñez y juventud de Franky McCourt. En Estados Unidos, su padre, Malachy McCourt, irlandés de Irlanda del Norte que ha viajado a América, que ha sido metido preso por tres meses por robo a un camión, conoce a una chica bonita, Angela Sheehan, en una fiesta de una amiga de ella. Se miraron, se gustaron, y tuvieron sexo. Ella quedó embarazada. Ella tenía dos primas que eran mandonas y casadas con americanos. Ellas le hablan a Malachy y lo obligan a casarse con Angela. Con cuatro meses de embarazo, se casaron los dos. Luego, nació Frank. Un año después, nació un segundo hijo, Malachy. Su papá de Franky le cuenta el cuento de Cuchulain. De joven se llamaba Setanta, y vivía en Irlanda, en el condado de Antrim. Setanta tenía un palo y una bola, un día le pegó a la bola que se le metió a la boca a un gran perro que pertenecía a Culain y lo ahogó. Culain se enojó mucho y dijo: ¿Quién va a cuidar de mi casa, de mi esposa, y de mis diez hijitos, y de esa cantidad de cerdos, y gallinas y ovejas? Setanta dijo: Lo siento mucho. Yo cuidaré su casa con mi palo y su bola. Y cambiaré mi nombre por el de Cuchalain, el mastín de Culain. Así lo hizo y se volvió el gran héroe, el mastín de Ulster. Toda la novela es narrada en primera pesona por Frank. Luego, la mamá tiene dos hijos gemelos, Oliver y Eugene. Frank tiene cuatro años, Malachy, tres. El papá de Frank es alcohólico, le gusta venir borracho. Su papá consigue un trabajo. Las dos primeras semanas trae el dinero semanal a casa. La tercera semana se lo gasta en licor. El papá viene borracho y hace levantar a sus hijitos y les hace prometer morir por Irlanda. La cuarta semana de pago, Frank y su mamá van al trabajo a esperar salir a su papá, para que no pierda la plata en licor. Pero no lo encuentran. Viene de noche y borracho, sin nada de dinero. Al día siguiente pierde el trabajo. Luego de un tiempo, Angela da a luz a una hija, Margaret. El papá, le gusta cargar a su hijita bebe y cantarle canciones irlandesas. Un día salen de paseo Frank y Malachy con sus hermanos mellizos en el cochecito y éstos tienen hambre. Franky se roba unos plátanos de una tienda. No lo descubren. Alimenta a los mellizos, que se untan banano en la cabeza. El y Malachy también comen. Aparece de pronto un señor, es el dueño de la tienda. Lo ve a Franky y le pide que se acerque. Le dice: Tú eres el hermano de los niñitos, ¿cierto?. Sí, señor. Mira, tengo esta bolsa de frutas. Si no te la doy, la tengo que tirar, ¿entiendes?. Así, pues, toma la bolsa. Hay manzanas, naranjas, bananos. Sé que les gustan. Los mellizos hacen bulla. Se les oye desde el otro lado de la calle. Cállalos. Así que regresan a casa con la bolsa de frutas y se la dan a su mamá. Le dicen el dueño se las regaló. Su hermanita de Frank, muere. Mueren los mellizos también, primero Oliver, y luego Eugene, por frío y mala alimentación. La madre está embarazada de nuevo. Viajan en barco hacia Irlanda, donde tienen familia. Dejan Estados Unidos. Conocen a su abuela materna y a su tía Aggie, casada con Pa Keating, que trabaja paleando carbón en la fábrica de Gas de Limerick. La abuela les consigue un cuarto donde vivir, por diez chelines que los paga ella. Y les recomienda que pidan ropa, zapatos y demás cosas en la caridad de la Sociedad San Vicente de Paul o sea vivan de la ayuda pública. Les dan botas para los niños y alimentos. Luego, empiezan a ir al colegio los niños. La mamá tiene a Michael, el nuevo hermanito. Al padre por ser de Irlanda del Norte y ser borrachín no le dan trabajo. Sus hermanos mellizos habían muerto de neumonía en la noche. Sus padres no sabían. Se mudan de vivienda para que la mamá Angela no recuerde a sus hermanitos muertos. En el colegio, Frank hace amigos. En la Navidad, les dan en la caridad, una cabeza de cerdo y unas salchichas, y les desean Feliz Navidad. Los niños siempre buscan trozos de carbón tirados en la calle para quemarlos en su chimenea de su casa. En su colegio de Frank, hay un chico que siempre hace preguntas. Le llaman Preguntas Quigley. Le pregunta al maestro: ¿Qué son esbirros, señor? Y el maestro se molesta. Le pide no preguntar. Le dice que el día que lo haga, el Señor lo recibirá en su seno. Luego pregunta: ¿Qué vas a quere, Quigley? Que Dios me acoja en su seno, señor. Le hacen confesar a Franky. Este le dice al sacerdote que dijo una mentira, le pegó a su hermanito, sacó un penique del monedero de su madre, y dijo una palabra fea. También escuchó un cuento de Cuchulain y Emer. El sacerdote le dice que eso no es un pecado. Luego, Franky le dice que le contaron que Emer se casó con él ganando un concurso de meadas. ¿Quién te contó ese cuento? Mikey Molloy, padre. Le da de penitencia rezar tres avemarías, tres padrenuestros y una oración especial por él mismo, por el sacerdote. Luego, al día siguiente, Franky tiene su primera comunión. Todo marcha bien, y luego su mamá le dice puede ir al cine del barrio a ver una película, pero a Franky no le alcanza la plata. Se encuentra con su amigo, Mikey Molloy. Le cuenta. ¿No tienes dinero? Le pregunta. No importa. Yo te meto. Voy a crear una distracción. ¿Qué es una distracción? Yo tengo con que entrar y cuando entre voy a fingir que me dio un ataque y el taquillero no va a saber qué hacer y tú te cuelas cuando yo dé el berrido. Estaré vigilando la entrada y cuando te vea adentro me voy a curar milagrosamente. Eso es una distracción. Eso es lo que siempre hago para meter a mis hermanos. La mamá de Franky le dice eso tal vez es un pecado y es día de su Primera Comunión. Mikey ese pecado corre por cuenta de él que no es tan buen católico. Soltó el berrido y Franky se coló adentro del cine, se puso al lado de Preguntas Quigley. Y pudo ver la película. La abuela consigue un inquilino, Bill Galvin, que para blanco porque trabaja en una fábrica de cal. La mamá de Franky le dice a la abuela que por seis peniques semanales, Franky le puede llevar el almuerzo a Bill Galvin. Así que Franky le lleva la comida a Bill Galvin. La fiamebrera emana un olor delicioso. Me comeré media papita piensa Franky. No se darán cuenta. Luego dice, mejor la otra mitad. Luego dice, mejor el repollo y el tocino también la mitad. Ahora no queda mucho, mejor me lo termino todo. Y decide que va a contar que un perro le robó la comida y lo trató de morder. ¿Ah, de veras?, dice Bill Galvin, ¿y qué es ese trocito de repollo que cuelga de tu bozo? ¿Te lamió el perro con un bocado de repollo? Le dice que regrese y cuente que se ha comido su almuerzo y le traiga más comida porque él está con hambre, sino lo matará y lo meterá en la cal. Su abuela le pega y le grita, luego, prepara sanguches de cerdo con papas fritas y lo envía. Esta vez todo llega bien. Su mamá y la abuela acuerdan que de castigo llevará dos semanas la fiambrera gratis. Y al regresar con la fiambrera, rezará por haber pecado. A su papá y a su mamá les sacan todos los dientes y tienen dentaduras postizas. Malachy se pone la dentadura superior de su papá y no le sale de la boca. Le ponen aceite y logra arrojarla. Franky tiene siete años y sus padres lo inscriben para que tome clases de danza irlandesa en su colegio. Franky dice: Pregunto cómo voy a morir por Irlanda si también tengo que bailar y canta por Irlanda. Pregunto por qué nunca me dicen: Puedes comer dulces y falta a la escuela e ir a bañarte al río por Irlanda. Su mamá le dice: No te hagas el vivo o te caliento las orejas. Le enseñan algunos bailes. En la noche, sus padres le piden que baile y baila lo que le han enseñado. Al siguiente sábado, su amigo Billy Campbell lo encuentra y le dice para qué va a ir a aprender a bailar si los bailes son para maricas. Franky le da la razón y se van al cine. En la noche, sus padres le piden que baile los nuevos bailes. Franky inventa bailes y nombres de bailes. Su mamá dice que qué raro, nunca ha escuchado de esos bailes. Al sábado siguiente va al cine con la plata del baile, y se compra un caramelo duro que le saca un diente, se le llena la boca de sangre. Regresa a su casa y le cuenta a sus padres. Su papá lo lleva a confesarse con un sacerdote. Franky le cuenta al sacerdote que fue al cine. El sacerdote se queja. Le dice que está bailando a las puertas del Infierno. Franky luego tiene 9 años, casi diez. Su padre consigue empleo en la fábrica de cemento pero lo pierde al poco tiempo por borracho. No regresó a trabajar en la tarde por ir a tomar. En los Molinos Rank le pasó igual, solo trabajó tres semanas y luego lo botaron. Franky aprende latín en el colegio. Sus padres lo quieren poner de monaguillo, Franky le gustaría ser monaguillo, pero no lo aceptan. Franky está en el cuarto grado de primaria. El primer día el profesor de matemáticas escribe tres palabras en la pizarra: Euclides, geometría, idiota. Esa parte de la pizarra nadie debe borrarla. Quedará todo el año. Amenaza con cortar la mano del que la borre. Dice que el que no entiende los Teorema de Euclides es un idiota. Brendan “Preguntas” Quigley pregunta: Señor, ¿Qué es un teorema y qué es un Euclides? Le pregunta: ¿Cómo te llamas chico? Brendan Quigley, señor, contesta. Este niño va a llegar lejos. ¿A dónde va a llegar, niños? Lejos, señor. Dice el maestro: Sin Euclides, niños, las matemáticas serían un pobre destartalo. Sin Euclides no podríamos ir de acá para allá. Sin Euclides la bicicleta no tendría ruedas. Sin Euclides San José no hubiera sido carpintero porque la carpintería es geometría, y la geometría es carpintería. Sin Euclides hubiera sido imposible construir hasta esta misma escuela. Paddy Clohessy murmura detrás de Franky: Que se joda Euclides. El profesor le dice: usted niño, ¿cómo se llama? Clohessy, señor. ¿Qué le decía a McCourt? Le decía que deberíamos ponernos de rodillas y darle gracias a Dios por Euclides. Luego, el profesor le hace algunas preguntas más y dibuja dos líneas paralelas en la pizarra. Explica que son dos líneas paralelas y no se tocan nunca, ni siquiera si se prolongaran hasta el cuello de Dios. Escuchan al profesor los alumnos y se preguntan qué tiene que ver eso con el mundo y los alemanes invadiéndolo todo. Al salir de clases les pregunta otro profesor qué les ha enseñado ese profesor. Clohessy le cuenta de la geometría y las líneas paralelas. Al día siguiente, los niños encuentran peleando discutiendo a los profesores. El profesor del quinto grado de primaria dice no les enseñe en cuarto geometría, eso le toca a él. Discuten un rato, está el director presente. En clases, el profesor le pregunta Mulcahy ¿Quién estaba al pie de la cruz cuando cruxificaron a nuestro señor? Mulcahy no sabe. Mulcahy, ¿cómo se dice imbécil en irlandés? Le pregunta el maestro. Omadhaun, señor. ¿Y qué es usted, Mulcahy? Un omadhaun, señor. Fintan Slattery levanta la mano y dice que él sí sabe. Para yendo a misa con su madre y quiere ser santo. Si lo molestan o le pegan, dice que rezaré por ti. Contesta que estaban las tres Marías. De premio, el profesor le regala la cáscara pelada de su manzana que está comiendo. Fintan dice que quiere compartir su premio con tres amigos: Quigley, Clohessy y McCourt. ¿Por qué Fintan? Son mis amigos señor. Los tres dicen: Gracias Fintan, y reciben las cáscaras para comerlas. Un chico al salir de clases le provoca pelea a Clohessy, Franky lo defiende y se pelean. Pero el chico es mayor y los golpea. Le sangra la nariz a Franky. Fintan se acerca y los invita a un sanguche en su casa. Van. Les invita un sanguche de queso y un té a ambos. Al día siguiente, Paddy Clohessy le dice a Franky que Fintan los invita a almorzar en su casa, no estará su mamá y tiene leche fresca. Aceptan y van. Fintan les muestra un sanguche de jamón  con mostaza y se lo come delante de ellos. Luego, se toma un frasco de leche. Luego dice: Ya es hora de regresar a la escuela. Paddy le dice: No nos has invitado nada. Se van corriendo a la escuela y Fintan entra, pero Paddy le dice a Franky: No puedo entrar. Si el profesor me pilla durmiendo me mata. Necesito comer. Vamos a buscar algo. Y van a un árbol de manzanas de un huerto al que entran. Se hartan de manzanas y se van. Franky va casa de Paddy y conoce a su familia. Su padre de Paddy está con tuberculosis. Le pregunta a Franky por su madre. Y la recuerda, de joven. Bailó con ella. Le pide le visite. Pasa la noche allí Franky. Al día siguiente, la mamá de Franky va a buscarlo a casa de Paddy. El papá de Paddy le habla y le hace recordar quién es él. Que bailaron juntos, y ella recuerda. Conversan un poco, ella baila un poco y canta la canción que bailaron. El papá de Paddy se alegra. Luego se va con Franky. Viene luego la guerra mundial. Varios irlandeses sin trabajo consiguen trabajo en la guerra. Envían tres o cinco libras esterlinas a su familia en Irlanda y la familia tiene para poner luz eléctrica en sus casas. Las mujeres irlandesas agradecen a Hitler por haber salvado a los irlandeses de la muerte y de la pobreza. El papá de Franky también va a la guerra y no les envía dinero. Averiguan luego que, en Inglaterra, su papá se emborracha en las cantinas y allí gasta su dinero. La mamá de Franky recurre a la caridad para alimentos. Toman mucho té y panes o bizcochuelos. Su mamá de Franky ha tenido un nuevo hermanito, Aggie. Pasa el tiempo, su papá regresa cuando la mamá enferma. Luego se va de nuevo a trabajar en Inglaterra en una fábrica. Les envía dinero muy rara vez. Franky consigue empleo de repartidor de telegramas. Franky tiene el sueño de ir a América. En Irlanda les pagan una libra esterlina semanal por repartir telegramas. En Estados Unidos les pagan 25 dólares. Yo ya la terminé pero no les puedo contar el final. Es una novela bien graciosa. Léanla.




viernes, 12 de agosto de 2022

 Jane Eyre

He terminado de leer la magnífica novela titulada “Jane Eyre” de la escritora, Charlotte Brontë. La novela empieza narrando la historia de una niña de diez años que vive con su tía, la señora Reed, y sus primos. Pero su tía es muy severa con ella, sus primos la molestan, ella tiene un fuerte carácter y no los soporta. Su tía decide enviarla a un colegio con internado para que le enseñen allí a ser una mujer decente. Así que la envía. En el colegio, hace amistad con una niña, Elena Burns, que la conoce porque la ve leyendo un libro. Conversan y hacen amistad. Pero eran muy severos con su amiga. Su amiga le dice Jane que se debe perdonar a los enemigos, así lo quiere Dios. Jane le había dicho a su tía que era mala. Jane no está de acuerdo. A su amiga Elena Burns, le da tuberculosis y muere, pero antes, Jane Eyre la abraza y se despide de ella. Hace otras amigas. El internado se llama Lowood. Estudia allí hasta que termina la secundaria, y luego, trabaja dos años como maestra. Se había convertido en la mejor alumna de su clase. Por eso la contratan. Pero un día se casa una de sus profesoras y se va del colegio. Y Jane se siente mal. No se siente bien sin ella allí. Decide cambiar de trabajo, quiere conocer el mundo de allá afuera. Tiene 18 años. Así que pone un aviso en el diario donde se ofrece a ser institutriz de niñas en casas particulares. Al poco tiempo recibe un pedido de una dirección donde necesitan una institutriz. Antes de partir, recibe la visita de Bessie, una de las chicas encargadas de limpieza y de la casa en la casa de su tía Reed. Se ha casado con el que era el cochero y viven independientes. Luego, de averiguar cómo están su tía y sus primos, al día siguiente se va al nuevo trabajo. La recibe la encargada de la casa, que es la señora Fairfax. Le explica a qué niña debe dar clases. A Adela Varens, una niña de diez años. Un día, Jane está caminando por el exterior de la casa cuando ve venir un señor en un caballo seguido por un perro. El señor se cae del caballo. Jane se presta a ayudarlo. El señor se pone de pie y le pregunta quién es ella. Jane le dice que es la nueva institutriz de esa casa. El señor se va a la casa. Es el señor Rochester, el dueño. Jane Eyre lo empieza a conocer. Se da cuenta que es un hombre bueno, a pesar de no ser tan guapo. En el segundo piso, había un cuarto de donde salían unas risas ja, ja, ja, de una mujer. Eso es un misterio para Jane. El dueño no le quiere explicar nada de ella. Le explica que le dará clases a Adela Varens, la niña de diez años que fue hija de Celina Varens, una bailarina que el señor Rochester conoció en París. Salían y vivían juntos. Pero una noche, el señor Rochester la vio bajar de un auto con otro hombre abrazados, y se dio cuenta que le engañaba. A los seis meses dio a luz Celina Varens, y le dijo que la niña era hija suya. El señor Rochester no le creyó nada. Luego, murió Celina Varens. El señor Rochester decidió hacer caridad y crió a la niña. La llevó a vivir con él. El señor Rochester le explica a Jane, que la mujer que vive en el segundo piso es Gracia Poole. El la tiene viviendo allí, no le puede dar más explicaciones. Jane sospecha que esa mujer es la de las carcajadas. Debe ser medio loca. Una noche, alguien prende fuego a las cortinas en el cuarto del señor Rochester. Felizmente, Jane escucha ruido y se despierta, va al cuarto de donde procede el ruido y lo ve al señor Rochester durmiendo y las cortinas quemándose. La cama también se empieza a quemar. Lo despierta y lo salva. Lleva agua y apaga el fuego. Jane va dando lecciones escolares a la niña Adela Varens, de día. El señor Rochester trae invitados a su casa, se piensa casar con una mujer muy bonita. Pero Jane sospecha que esa mujer solo está interesada en su plata del señor Rochester. Una noche, en que tienen fiesta, se aparece una mujer negra que adivina el futuro a todos. Pide que pasen por un cuarto uno por uno y les lee el futuro. A todos les lee la mano. La última en ir es Jane Eyre. Ella se da cuenta que es el señor Rochester disfrazado de negra. Solamente hizo aquello para averiguar qué pensaban sus invitados de él. Al poco tiempo, el señor Rochester le dice a Jane Eyre que está enamorado de ella y quiere casarse con ella. Jane Eyre le dice que también está enamorada de él. Planifican casarse en un mes. Y alistan sus ropas para el viaje de bodas y todo está listo. Una noche, viene un hombre desconocido a su casa. Sube a conversar con el señor Rochester. Jane se acuesta sin saber nada de ese hombre. En la noche, el señor Rochester le toca la puerta y le pide que le ayude. La lleva a un cuarto donde estaba Gracia Poole, y le pide cuide las heridas del señor que ha venido, tienen el hombro vendado, y le ordena no hablar al señor invitado. Jane lo cuida. Más tarde, viene el señor Rochester con un médico. Este lo termina de curar al hombre, que dice que lo atacaron mordiéndole el hombro. Parecía que se quería comer su hombro, pero no dice quién. Al amanecer, lo llevan a la calle y lo meten en un coche para llevarlo a otro lugar. Luego, el día de la boda, van a la iglesia el señor Rochester y Jane. Pero aparece un señor diciendo que ese matrimonio no puede llevarse a cabo. Todos los invitados se asombran. El señor dice que no se puede realizar porque el señor Rochester es un hombre casado. Y da el nombre de la mujer, un nombre desconocido. El señor Rochester acepta que es verdad y el matrimonio no se realiza. Al regresar a su casa, le explica a Jane lo que ocurre. Le explica que hace años atrás, conoció una mujer bonita y grande, se casó con ella porque además tenía plata. Pero luego de casados, se enteró que la mamá de la mujer era loca, su hermana también era loca, su otro hermano era enfermo mental. Solo tenía un hermano cuerdo. Que era el señor que había sido mordido. El señor Rochester le explica que la mujer con la que se casó al cabo de un tiempo también se volvió loca, y que él la tuvo que recluir en una habitación vigilada por la señora Gracia Poole, que antes ha trabajado con monjas. Pero a veces, lograba escaparse de su habitación y quitarle las llaves a la señora Gracia, y se metía a los cuartos y prendía fuego. Jane recuerda que una vez vio en su cuarto que alguien acuchillaba un velo de mujer en su cuarto. Era esa mujer del señor Rochester. Como era loca, el señor Rochester no se podía divorciar de ella y la mandaba cuidar. Había tenido tres amantes. La primera fue Celina Varens, la bailarina francesa, que murió. Luego, tuvo otras dos amantes. Quería casarse con Jane pero ella le dice no se puede. Así que un día, Jane decide irse sola. Se va caminando por el camino. Camina tres días y pasa hambre, llega a una casita con luz. Le dan cobijo allí. Dos chicas jóvenes y bonitas con su hermano. Jane recupera la salud y estudia con ellas que leían mucho. Jane estudia alemán y el joven estudia el idioma hindú. Es sacerdote. Va a viajar a la India como misionero. Le pide matrimonio a Jane. Pero Jane no lo acepta. Ella sigue enamorada del señor Rochester. Jane pinta cuadros. Ese joven le consigue trabajo como profesora de un pequeño colegio para niñas. Un día el sacerdote joven le va a visitar a Jane y ve su cuadro que ha pintado y ve algo. Coge un cuchillo y corta el borde del cuadro, y se va. Al día siguiente, regresa y le cuenta a Jane. Un hombre pobre se casó con la hija de un rico, tuvieron una hija a la que pusieron Jane Eyre de nombre, luego, ambos murieron en un accidente. Pero el hombre tenía un hermano que era comerciante y llegó a tener mucho dinero. También tenía un hermano que era sacerdote evangélico. Ese sacerdote evangélico era el padre de ellos tres, y había muerto. El tío comerciante era rico y había muerto, antes de morir, dejó en herencia todos sus bienes a nombre de su sobrina Jane Eyre. Que la buscaran y le dieran su fortuna. Entonces Jane descubre que ese sacerdote y esas jóvenes eran sus primos. Se pone contenta. El primo le cuenta que ella recibirá en herencia 20 000 libras esterlinas con lo cual, es rica. Pero Jane, decide compartir su fortuna con sus primos. Les reparte 5000 libras esterlinas para cada uno. Luego, renuncia al trabajo y va en busca del señor Rochester. No sabe nada de él. Lo extraña mucho. Y encuentra su casa quemada, las piedras con color negro. Ha habido un incendio. Y entonces, pregunta en un bar cercano acerca del señor Rochester. No les puedo contar más para que no pierdan la emoción de leerla. Es una de las grandes obras maestras del siglo XIX. Léanla. 




lunes, 1 de agosto de 2022

 Cámara de gas

He terminado de leer la magnífica novela titulada “Cámara de gas” del escritor John Grisham. La novela narra la historia de Sam Cayhall, un ex miembro del Ku Klux Klan, que está preso en una cárcel federal, y que había puesto una bomba en un estudio de abogados de un abogado judío, que defendía a judíos y negros. Por eso le tenían cólera. No actuó él solo, lo ayudaron dos hombres más. Wedge es el que puso la bomba, y Sam el que alertaba, el que planeó todo fue Dogan. Dogan huyó, Wedge huyó, pero Sam quería ver el espectáculo y la explosión le alcanzó un poco, tuvo heridas en el rostro. No murió el abogado judío Kramer sino sus dos hijos que habían ido al estudio jurídico de su papá. El abogado Kramer quedó sin piernas por la explosión, no murió porque había ido a buscar unos papeles a otra zona del edificio. Luego, Kramer ingresó a un hospital psiquiátrico y se suicidó. Sam fue metido preso, pero habían dilatado su orden de ejecución basados en varios trucos jurídicos. Sam y los otros dos, habían puesto la bomba para las 8 am, cuando no había nadie en el edificio, pero la bomba estalló después, a destiempo y mató gente. Sam tenía su auto estacionado a una cuadra y la policía que buscaba pasar no podía porque el auto de Sam, a pesar de los gritos de la policía no se movió hasta el estallido de la bomba con temporizador. Dogan fue asesinado un tiempo después. Sam fue metido a la cárcel. De Wedge no se supo más. Un abogado del bufete de abogados de Kravitz & Bane, que constaba de 300 abogados, la mayoría ganaba 400 000 dólares anuales, decide defender a Sam Cayhall. Se llama Adam Hall. Va a la comisaría para avisar que será el abogado del preso Sam Cayhall, y les dice que es su nieto, hijo de Eddie, hijo de Sam Cayhall. Sam tuvo una hija, Lee que se casó con un millonario Phelps, pero éste la engaña con varias secretarias bonitas que son sus amantes. No viven juntos. Se reúnen de vez en cuando para asistir a reuniones. Lee es alcohólica, descubre Adam. En la cárcel, visita a Sam y le dice es su nieto. Sam llora un poco. Tienen cuatro semanas de plazo hasta la fecha de ejecución que ha ordenado el gobernador. Durante ese tiempo, Adam se encarga de inventar mentiras, como que Sam es medio loco y no puede ser ejecutado. Pero el gobernador le desniega. Dicen más bien es muy inteligente y astuto el condenado Sam. Siempre gana jugando a las damas Sam a sus amigos en la cárcel. Adam consigue convencer a gente del gobernador para que abran una línea de opinión sobre el gobernador, entonces contrata 20 personas para que llamen por teléfono dando nombres falsos y diciendo que Sam no merece la pena de muerte. Hacen montones de llamadas, más de 300 llamadas y el 90% dicen no merece la pena de muerte Sam Cayhall. El gobernador quiere salir reelecto así que piensa bien si lo perdona o no a Sam. Un día que Adam está hablando con su tía Lee, ella le cuenta que una vez, su papá Sam mató a un negro que trabajaba en sus tierras cultivando la tierra. Lo que pasó es que su hermano Eddie era amigo del hijo del negro y jugaban con juguetes. Un día se perdió un soldadito de juguete de Eddie y éste le echó la culpa a su amigo. Discutieron un rato, llegó en eso Sam y Eddie le contó que su amigo le había robado un soldadito. Sam le dijo al niño negro que devolviera el soldadito. El niño dijo que no lo había robado. Sam le pegó al niño. Luego el niño negrito se fue a su casa y le contó a su papá. El señor negro vino y se peleó con Sam. Se dieron duro, pero el negro le dijo a su hijo que fuera por su escopeta, y Sam le dijo a Eddie que fuera por su escopeta. Eddie llegó más rápido con la escopeta. Entonces Sam le disparó al negro y lo mató. Cuando llegó el niño negro con su escopeta, se la quitó. Luego, llamó a la policía y dijo que mató al negro en defensa propia, que lo había atacado con la escopeta. Su hijita de Sam, Lee, estaba subida en el árbol que tenían en su jardín, en lo alto y nadie la vió, pero ella vió todo, cómo se pelearon y cómo lo mató al negro. Luego Eddie entró en su casa y su hermana también, y Eddie encontró en su bolsillo el soldadito de juguete que faltaba. Se sintió culpable y se puso triste. Su hermana también se sintió mal. La policía vino y se llevó al negro muerto. Nada le pasó a Sam. Sam y sus antecesores eran miembros del Ku Klux Klan, y mataban negros de vez en cuando. Era algo generacional. Su padre les había metido a Sam y sus hermanos que eso estaba bien. Sam y sus hermanos se hicieron por eso, miembros del Ku Klux Klan, igual que sus abuelos y bisabuelos. Lee lloró al recordar ese suceso de su vida. Adam la consoló. Dejó de ir unos días a ver a Sam. Luego siguió yendo a conversar con Sam para averiguar si otra persona había puesto la bomba. Sam no era experto en bombas. No podía haberla puesto él solo, le tenían que haber ayudado. Un día le llega visita a Sam.  Es Wedge. Sam le dice que ha soñado con matarlo un montón de veces. Wedge le dice que no cuente nada si no quiere que haga daño a su familia. Wedge no es su verdadero apellido. Tiene otra identidad. No quiso ir a la Guerra de Vietnam y fugó al Canadá. Luego, regresó a Estados Unidos de manera ilegal con una nueva identidad. Tiene nombres y apellidos distintos. Sam, aunque quisiera no podría hacerle nada. Le dice que disfrutará verlo morir. Sam le dice que le odia. Se va Wedge. Pero los días siguientes, Sam no le cuenta nada de Wedge a Adam. Wedge fue el que puso la bomba. Si Sam contaba eso podía salvarse. ¿Qué pasará? ¿Contará Sam sobre Wedge y la bomba? ¿Se logrará salvar de la Cámara de Gas, Sam? Lea la novela y se enterará