sábado, 26 de diciembre de 2020

 

La Legión Perdida

He terminado de leer la magnífica novela “La Legión Perdida”, del escritor Santiago Posteguillo. Es una novela histórica, basada en hechos reales. Si no fuera por Adriano que elevó los impuestos y creó problemas en el Imperio Romano, tal vez Trajano hubiera conquistado toda Partia. Pero justo antes de la Batalla Final contra los partos, le avisan de disturbios en Roma, que debe regresar a solucionarlos. La novela completa la Trilogía de Trajano. Es el Volumen III de dicha trilogía. La novela narra por partes el año 53 A.C., y por partes el año 107 D.C., la época de Trajano, porque en el año 53 A.C., fue  derrotada la legión perdida. Y se perdió una legión entera en el desierto, nadie sabe con certeza adonde fueron. Bueno, empezaré narrando que el año 53 A.C., tiempos de Julio César, Pompeyo y Craso. Craso ataca a los partos y a los armenios. Y desaparece su legión. Luego, estamos en 107 D.C., El gladiador Marcio está peleando en el anfiteatro Flavio. Ya está viejo, y le llaman Senex. El gladiador joven le clava su tridente en una pierna. Trajano y Lucio Quieto hablan de tener una reunión más tarde con el embajador Shaka. Trajano le pregunta si tiene miedo a los partos. Lucio le dice que él no pero los soldados le temen a la legión perdida.

Mientras tanto en China, que se llama el Imperio Han, muere el emperador He. Le dice a su esposa solo confíe en su familia y en Ban Zao; y en Fan Chun. Entonces, la emperatriz, muerto el emperador, llama a Fan Chun y le pide traiga a Kan Ying, quien había hecho un viaje secreto hasta llegar a Da Qin (el Imperio Romano). Ella quería saber todo lo que había averiguado allá porque eso tendría repercusión en su Imperio. Fan Chun le promete traerlo.

En la arena del Anfiteatro Flavio, Marcio se quita el tridente y lo levanta. Se pone de pie. El contendiente tiene miedo y trata de huir. Pero salen otros esclavos y lo rematan a palos por cobarde. Llevan a Marcio adentro. Lo va a curar un médico. Le da la espada de madera, lo que significa que ahora es libre. Pero está débil. Ha perdido mucha sangre de la pierna. Un médico lo va a curar y luego lo llevarán donde Trajano que quiere hablar con él.

Mientras tanto en Loyang, capital del Imperio han, Li Kan, un guerrero enviado por su comandante busca a Fan Chun. Cuando se presenta a Fan Chun, este lo interroga. Luego, le dice debe encontrar a Kan Ying, que hace años hizo un encargo para el emperador He. No responde a sus cartas de Fan Chun. Li Kan debe traer a Kan Ying donde Fan Chun. Le darán información de cómo hallarlo. Luego, se va Li Kan.

En el Palacio Imperial de Roma, la Domus Flavia, llega Marcio escoltado por guardias. Trajano le da un salvoconducto y le dice puede ir al norte a ver a su esposa e hija. Le da caballo y dinero. Le dice a su regreso le encargará una misión. Marcio se va.

Al rato, le avisan a Trajano que llegó Shaka, el embajador del Imperio Kushan. Entre Roma y Kushan está Partia. Hay guerra civil en Partia, entre Osroes I con su sobrino Vologases III. Si Roma y Kushan atacan a los partos, pueden ganar. Pero si se demoran, los partos tienen un plan: Aryazate. Es la hija pequeña del emperador parto Osroes, y su plan es casarla lo antes posible con Vologases III, sería un matrimonio que sellaría la paz, y los partos se harían más fuertes. “No atacaré Partia sin un motivo” dice Trajano. Se va Shaka. Trajano hace cálculos de cuántos hombres requiere para vencer a Partia.

Mientras tanto en Cesifonte, la capital invernal del Imperio Parto, hay reunión del rey Osroes con sus hermanos, las princesas y los nobles. Osroes explica que piensa luchar contra Vologases. Su sobrino Exedares, rey de Armenia, les niega asistencia en la guerra contra Vologases. Así que ha decidido su hermano Partamasiris irá hacia Armenia y depondrá a Exedares. Será el nuevo rey de Armenia y enviará refuerzos para luchar contra Vologases. El otro hermano de Osroes, Mitrídates. teme la reacción de Roma pero no se queja. Partamasiris le pregunta si ya no casarán a Aryazate con Vologases. “Así es” dice Osroes. La llama a su hija y ella se acerca. Es una niña de 9 años. “Quítate el  velo” le dice Osroes. Es bonita  ven todos. Partamasiris le pregunta a Osroes si se la puede dar de premio a él si tiene éxito en su misión. “Me lo pensaré” dijo Osroes. Luego, Aryazate regresa con las princesas.

En Roma, Adriano, el sobrino de Trajano, se reúne con Atiano, su extutor y le dice Trajano se ha entrevistado con un embajador de kushán. Se ponen de acuerdo en que sobornarán pretorianos para enterarse de los proyectos de Trajano.

Mientras tanto, en Cumidara, al nordeste de la Dacia, Marcio encuentra al legatus imperial, Tercio Juliano. Habla con él y le muestra el salvoconducto. Le explica quiere encontrar dos mujeres sármatas. Manda que lo escolten hasta la frontera y luego lo dejen ir.

En las proximidades de Petra, Arabia, el legatus Palma avanza con soldados pero solo encuentra arena. En la noche, los nabateos los rodean. En la mañana, se ven rodeados, se ponen su ropa y armas. Vienen dos nabateos a caballo y hablan con ellos. Les dicen deben rendirse.

La novela es narrada en dos tiempos. De regreso a 53 A.C., Casio le pregunta a Craso por qué no han aceptado la ayuda del rey de Armenia. Craso le dice que esos son problemas de Armenia con los partos. Si aceptan su ayuda, luego los armenios pueden enfrentarse a los romanos.

Mientras tanto, en Mesopotamia, el rey de los partos, Osroes había llamado a su valiente general Surena. Este le dice tiene más de diez mil soldados con arqueros, catafractas y jinetes con camellos. Orodes lo intuye muy ambicioso a Surena, así que le encarga enfrentar a 70 mil legionarios romanos. El mismo Orodes con otros hombres enfrentarán a los armenios.

Mientras tanto, Craso conversa con un mercader árabe, que en el pasado ayudó a Pompeyo. Este le sugiere dejen de viajar pegados al río y se internen en las arenas. Los romanos son superiores en número. Podrán vencer a los partos. Craso acepta el consejo.

Los romanos avanzan sin parar diez días por el desierto, cargando agua y provisiones. Están cansados. Encuentran un riachuelo y se mojan, y beben agua de él. Entonces ven llegar a los partos gritando y haciendo sonar sus tambores de guerra. Los romanos forman un cuadrado pero partos nos los atacan sino que siguen de largo, es extraño. También los partos les lanzan una lluvia de flechas. Craso envía a su hijo y a 1500 jinetes a enfrentar a los partos que tratan de rodearlos. Los catafractos levantan nubes de polvo y los romanos no saben donde disparar sus flechas. Eran casi todo el ejército parto, diez mil guerreros contra 1500 jinetes romanos. Los destrozan. El hijo de Craso y varios jefes romanos se suicidan.

De nuevo en 107 D.C., Trajano recibe una carta de su legatus Palma, desde Arabia. La hace leer por su nuevo secretario, Fédimo. Palma le narra los hechos y que luego que formaron un cuadrado  estaban rodeados por los nabateos. Le han hecho propuesta de sumisión a Roma si los dejan vivir en paz. Conocen el poderío de Trajano. Entonces Trajano decide le escribirán a Palma que acepte las condiciones del pacto, por ahora.

En 108 D.C., a 150 millas al norte de Cumidavia, Marcio bebe agua de un río. Alguien le dispara una flecha. Le cae a la pierna. Eran Alana y Tamura. Su hijita le disparó sin reconocerlo. Marcio abraza a Tamura y la perdona. Conversa con Alana y le cuenta el emperador Trajano le dio la libertad y la opción de volver con su familia a Roma. Le quiere asignar una misión. Alana está de acuerdo, por esa zona solo viven de la caza y tienen muchos enemigos. Marcio le dice que ya no se separarán jamás.

Mientras tanto, en Ch’ ang-an, antigua capital del Imperio han, China, Li Kan busca y halla a Kan Ying. Recuerda lo que le dijo Fan Chun: “No es de fiar”. Lo lleva en otro caballo adonde Fan Chun. Encuentran rateros en el camino. Li Kan saca su espada y mata a varios, otros huyen. Siguen su camino con Kan Ying.

Mientras tanto, en Bagram, norte de la India, capital del Imperio Kushan, en 109 D.C., el consejero Shaka conversa con Kanishka, el hijo del rey Kadphises que está muy enfermo. Le cuenta que Trajano, por el momento, no está apurado por luchar con los partos. Le dice los romanos en el pasado, tuvieron una legión perdida. Eso los asusta. Kanishka le dice que su padre ha decidido que sigan la religión budista en su Imperio Kushan. También le dice la solución para evitar que los partos se unifiquen es matar a la niña Aryazate. Luego se va.

En noviembre de 109 D.C., Trajano disfruta del espectáculo de lucha de dos barcos en una piscina  gigante, le llaman naumaquia. Un barco hunde al otro. Los que se hunden son devorados por tiburones. Marcio había sido llamado por Trajano, y éste le ofrece el puesto de lanista, el que prepara los gladiadores para luchar en el Circo Máximo. Marcio acepta y se va. Trajano hace llamar al filósofo Dión Coceyo. Trajano ordena llevar botes que recojan a los del barco ganador que también se estaba hundiendo. Llega Dión Coceyo y Trajano le ordena vaya donde el nuevo lanista y se ofrezca como maestro de su hija de ocho o nueve años. Le ordena que le enseñe el idioma sánscrito.

En el año 111 D.C., en Nicomedia, Bitinia, un cristiano Marción decía no debían comer comida pagana los cristianos, sacrificada a los dioses romanos, que estaban vendiendo. Lo golpean y arrestan. Cuando despierta está con cristianos de dinero. El romano Plinio le dice que si adoran a sus dioses romanos saldrán en libertad, sino se comunicará al emperador Trajano qué hacer con esos cristianos. Marción adora los dioses romanos y es puesto en libertad.

Mientras tanto, en los partos, Partamasiris se paseaba con su caballo por la ciudad de Artaxata, Armenia. Se la ha conquistado a su sobrino Exederes. Al llegar al palacio mata con su espada a su sobrino. Se sienta en el trono. Luego, manda matar a toda la familia y mujeres de su sobrino. Piensa en Aryazate, la quiere para él. Piensa Osroes no se la negará.

En Roma, en el año 112 D.C., Dión Coceyo le enseña lenguas e historia a Tamura. Le enseña  latín, sánscrito  y griego. Tamura ya tiene doce años  y le gusta el luchador Ayax, que es griego. Su padre Marcio lo entrena.

Mientras tanto, en el palacio imperial, Fédimo, el secretario le lee una carta de Plinio a Trajano donde le pregunta cómo tratar a los cristianos. Trajano le dicta que perdone a los cristianos que adoren dioses romanos.

En Partia, Rixnu, la amante favorita de Osroes, intuye que Aryazate tiene fiebres porque las dos enviadas por Kadphises la están envenando. Llegaron hace dos semanas y la niña se puso mal de pronto. Ellas la alimentaban. Rixnu, le avisa su intuición a la reina. La reina golpea a la que alimenta a Aryazate y le pregunta: “¿Por qué?”. “Tienen a mis hijos” contesta esta.

Mientras tanto, en Roma, Trajano y su séquito siguen al arquitecto Apolodoro de Damasco que les muestra el nuevo foro de Roma. Quedan admirados todos de su belleza y gran tamaño de la  edificación. Apolodoro también había terminado de supervisar la finalización de las obras del nuevo Portus Traiani Felicis en Ostia, una ampliación del puerto. Luego entran a ver las nuevas bibliotecas donde el piso es de granito recubierto con mármol multicolor de Asia. Las paredes son de hormigón y ladrillo. Todo hecho para evitar la humedad en el edificio que afectaba los rollos de papiro. Le llega un correo a Trajano que lo lee y no dice nada. Suben por unas escaleras a los alto de una gran columna por su interior es una escalera de caracol y ven un panorama de Roma. Cuando bajan, Trajano le susurra a Lucio Quieto que los partos han matado a Exederes. Partamasiris está en el trono de Armenia. Eso rompe su tratado con Partia. Ya tienen una excusa para hacerle la guerra a los partos.

Mientras tanto, en Cesifonte, Partia, Osroes conversa con Mitrídates su hermano. Le cuenta sobre la victoria de Partamasiris en Armenia. Le dice le pedirá tropas a Partamasiris para luchar contra Vologases. Así, Armenia queda desprotegida y débil. Le cuenta que Aryazate ya está bien. Ha enviado mensaje a Partamasiris que deben esperar a que la niña sea un poco mayor. Le cuenta también que mataron a las mujeres que le daban veneno a Aryazate, las mujeres kushán.

En Roma, en el palacio del emperador, la Domus Flavia, Trajano ha llamado a tres hombres y los presenta, Marcio el lanista, Maes Titianus el mercader de Siria, y Arrio, oficial de la Marina Imperial. Viajarán hasta Kushan por ruta indirecta. Primero hacia Alejandría,  y desde Egipto surcarán la mar Eritrea hasta alcanzar las costas de la India. Marcio debe cuidar la vida de Titianus que lleva la carta para el rey Kadphises en un papiro. Se van todos pero se queda Marcio. Le dice deben llevar otro gladiador y además, quiere llevar a su mujer e hija. Trajano acepta. Entonces, Marcio se va.

Cerca de Roma, en las afueras de la ciudad, Plotina y Adriano, luego de haber tenido sexo, conversan. Ella le dice a Adriano que Trajano lo enviará como gobernador de Siria. Luego, ella se va y llega a visitar Atiano a Adriano. Le cuenta que Trajano enviará hombres a Oriente, parece al Imperio Kushan. Adriano le pide que averigue de esa cadena de acontecimientos hacia Kushan, el eslabón más débil y lo destruya. Atiano acepta.

En Roma, una noche, Tamura escapa de casa de sus padres y se va a la calle. Antes se escapaba de día, pero ahora lo hizo de noche. De pronto, unos guardias pretorianos la vieron y la capturaron. La llevaron atada y con mordaza caminando. Luego le vendaron los ojos. La llevaron a un lugar con piso de mármol. Llegó un hombre grande y ordenó quitarle las mordaza, desatarla y quitarle la venda de los ojos. Era Trajano. Le dijo: “Te voy a contar algo y no se lo contarás nunca a nadie. Solo hablarás de esto con la persona que te voy a decir y no será hasta de aquí a un tiempo”. Luego le contó algo. Le hizo repetir a ella lo mismo para ver si lo había entendido. Le regaló una estatuilla pequeña de Júpiter. Luego se la llevaron a su casa. Trajano se queda hablando con la Vestal Máxima y le pregunta qué le augura. Ella le dice: “Creo, César, que el emperador solo podrá ser derribado desde dentro”.

Luego, ella le entrega un papiro de Julio César para conquistar el mundo, que Trajano se lo había hecho guardar. Luego se separan.

Mientras tanto en Loyang, capital del Imperio han, China, la emperatriz Deng tiene frente a sí a Kang Ying, detrás de él está Li Kan. También está Fan Chun. Habían pasado cuatro años desde que Li Kan trajera a Kang Ying, lo habían metido preso esos años a Ying. Ahora la emperatriz lo interroga, que cuente cómo es Da Qin (Roma). Kang Ying empieza a narrar, pero Fan Chun lo interrumpe y dice: “En realidad nunca has estado en Da Qin ¿verdad?” Y Kang Ying confiesa que no llegó a Da Qin porque los de An-shi (Partia) no le permitieron seguir. Los de Yuegzhi (Kushan) sí le permitieron pasar pero al regreso también le hicieron problemas. Trató de ir por mar, por barco, pero no pudo. Tuvo que regresar. Al emperador He lo encontró enfermo. Le contó algunas cosas del viaje, pero el emperador se quedó dormido. Un guardia le ordenó salir. Y esa fue toda su historia. Jamás mintió al emperador He. La emperatriz Deng ordena siga en prisión y luego ya verán qué hacer con él. Fan Chung le dice a la emperatriz se de cuenta los Yuegzhi (Kushan) y el Imperio An-shi (Partia) no quieren que se contacten con Da Qin (Roma). Tal vez los de Da Qin se contacten con Loyang algún día.

Mientras tanto, en el puerto de Ostia, , en 112 D.C., Dión Coceyo va a despedirse de su alumna Tamura. Le regala tres libros en papiros en  tres idiomas distintos. Le da una última lección. Cuando no tenga conque defenderse coja lo que encuentre y se defienda. Luego le lee parte de uno de los libros.

De nuevo en 53 A.C., en las proximidades de Carrahe, Craso y sus soldados luchan contra los partos pero las flechas y catafractos enemigos que levantan polvo los destruyen. Cuando anochece paran de pelear. Los romanos huyen a la fortaleza de Carrhae, que es romana. Habían cohortes romanas perdidas en la noche, que se esconden en unas rocas, y matan varios partos. Los partos los dejan ir, no los matan. Antes sí habían matado a los heridos en el campo de batalla. Los partos piden negociar con Craso y lo matan. Entonces los romanos luchan y luego huyen. Luego, vuelven a luchar. Surena, el líder de los partos les promete respetar su vida si se rinden. Solo quedan 10 000 legionarios romanos. Y se rinden.

Mientras tanto, en Artaxata, el rey Orodes celebra la victoria con fiesta y también el matrimonio de su hijo Pacoro con la hermana del rey de Armenia. Han traído 12 esclavos romanos para que vean la fiesta y la obra de teatro a representar, “Las Bacantes” de Eurípides. En la parte de la obra cuando la madre de Penteo le corta la cabeza a su hijo borracha, ponen la cabeza Craso recubierto con oro. Druso, Cayo y Sexto, están entre esos 12 romanos que presencian la obra.

De nuevo en Atenas, otoño de 113 D.C., Trajano recibe y conversa con Mestro Plutarco en su palacio imperial. Plutarco era griego, escritor y sacerdote del Templo de Apolo en Delfos. Le regala a Trajano un papiro con la vida de Escipión El Africano. Trajano le agradece. Plotina está presente escuchando y pregunta qué pasó al final de la derrota de Craso. Plutarco les cuenta que Orodes escuchó sobre actos de Surena. Vio sus ambiciones y lo hizo envenenar. Pero luego, Fraates, uno de los hijos de Orodes, hizo matar a sus 30 hermanos y se quedó como rey él solo. Y los diez mil prisioneros romanos se supone se debieron casar con esposas partas. Luego Trajano habla de la seda y las perlas que compran de Oriente. Plotina sospecha quiere derrotar a los partos para comprar seda china. Le avisan a Trajano han llego mensajeros. Trajano dice que pasen.

Mientras tanto, en el Mar Mediterráneo, cerca de las costas de Egipto, el barco de Marcio avanza veloz. El capitán Arrio dice que las tormentas los han retrasado varias semanas. Hay que aprovechar el buen tiempo. Marcio se va donde Alana y le dice no confía en Arrio. Los tres soldados pretorianos que subieron a último momento también le parecen sospechosos.

En Atenas, en el palacio imperial, Trajano recibe a los partos que le dicen les preocupa las legiones romanas cerca de la frontera con Armenia. Trajano dicen han depuesto al rey de Armenia y eso rompe el pacto de Roma con Partia. Uno de los partos, el que habla, es Pastamaspates, hijo del rey parto Osroes. Los partos le ofrecen cofres pequeños con monedas de oro y plata, esmeraldas y rubíes. Le dice han traído un cofre más grande lleno de oro. Trajano les dice que lo comprarán con regalos. En Antioquía, en tres meses más, los esperará para reunirse con ellos. Se van todos y queda Quieto, que le pregunta por qué en Antioquía. Trajano le dice que quiere inspirar miedo.

En la Mar Eritrea, 113 D.C., Marcio, Titianus, Tamura, Alana, Ayax y Arrio bajan a tierra en un lugar. Marcio encargó a Ayax que vigilara a los tres soldados. Se quedó Ayax en el barco. Cuando volvían con sus compras, Mario y el resto ven fuego en su barco. Ayax pelea con los soldados. Tamura les dispara flechas a dos soldados y los mata. Ayax mata al otro. Cuando Marcio y los otros le preguntan viniendo en un bote qué pasó, Ayax cuenta que empezó un incendio en la sección donde estaban las telas, los marineros trataron de apagar el fuego y los soldados los atacaron. Esos soldados habían provocado el fuego. Pero ya todo es fuego en el barco. Huyen a tierra en el bote.

Mientras tanto, en Seleucia de Pieria, Atinio le cuenta a Adriano que sus hombres quemaron el barco. Adriano se alegra. Le d ice todavía tienen un infiltrado entre ellos y que puede arruinar su misión. Le da una bolsa con monedas de oro a Atinio y se va.

En Antioquía, Trajano recibe embajadores de varios reinos. Viene el príncipe de Partia también. Conversan y Trajano le pide depongan a Partamasiris como rey de Armenia. Los romanos buscarán un rey mejor.

Mientras tanto, Marcio y los demás conversan. Tratan de hallar la solución para conseguir otro barco que los lleve hasta la India. Razonan que Titianus con su incienso y mirra puede comprar una falúa (pequeño barco) y luego con el copal y el oro puede comprar marfil que les serviría para comprar un barco más grande en Muza y venderían la falúa también. Pero el marfil barato solo lo venden en Raphta y es peligroso porque allí hay piratas.

En Antioquía, Adriano le dice a Trabajo que no luche con los partos. Entonces Trajano le dice que se quede en la retaguardia, en Siria, controlando el flujo de aprovisionamiento de las legiones.

En Loyang, 114 D.C., Yan Ji, la amante del emperador An-ti, le dice que siendo ella su amante favorita, deben tener un hijo ellos dos para que sea el nuevo emperador y no el hijo de Li, Liu Bao. An-ti le dic su madre gobierna y no puede contradecirla. Ella ha elegido a Liu Bao como sucesor. “Tengo un plan”, le dice Yan Ji An-ti. Mientras tanto, en la Sala de Audiencias de Loyang, la emperatriz Deng habla con Fan Chun. Este le muestra un nuevo material: el papel, que ocupa menos espacio que el bambú y pesa menos. Ella aprueba su uso para libros. Fan Chun también le cuenta que está por estallar una guerra entre el Imperio An-shi (Partia) y el Imperio Da Qin (Roma). Ellos deben reforzar la seguridad del Imperio han enviando un guerrero a la zona fronteriza. Fan Chun va donde Li Kan y le dice irá a la zona de frontera a monitorear y avisar todo lo que se entere. De los Da Qin y de An-shi. Cualquier mensajero o comerciante que tenga información de Da Qin y de la  guerra lo lleve donde la emperatriz.

A lo largo del Río Eufrates, en 114 D.C., Trajano avanza pegado al río Eufrates, se le rinde una ciudad armenia, Arsamosata. Acampa luego en una fortaleza romana. Llegan varios legionarios romanos. Casi cien mil hombres, la mayor concentración de legiones romanas nunca conocida.

Mientras tanto, en el mar, costa de Azania, Tamura conversa con Ayax y ven un barco pirata matando pescadores y reclutando esclavos. Después de varios días llegan a Rhapt, el último puerto del mundo conocido. Allí el marfil es barato.

En Elegeia, 114 D.C., Trajano recibe a Partamasiris y le pide su corona con diadema. Luego lo hace llevar fuera donde otros lo matan. Nombra a uno de sus legionarios como primer gobernador de Armenia. Luego, manda comunicar a su ejército que se han anexionado Armenia. Le dicta carta a su secretario dirigida a Osroes, señor de Partia. Le dice que Partamasiris intentó huir de la escolta que lo conducía a Partia, y uno de sus pretorianos lo ha matado. Pide lleven la carta a Zeugma y la entreguen a algún barco mercader que  va al sur.

En Roma, el comerciante Marción se reúne con Alejandro, Sixto, y Telésforo. Les dice su plan para impedir se pierda la fé en Cristo es escribir un libro sagrado sobre Jesús. Ellos le dicen su idea es buena pero deben consultar con Ignacio. Le escribirán una carta. Luego se van.

En Artaxata, Armenia, comunican a Trajano que Quieto y sus hombres han matado a los últimos rebeldes de Armenia. Ahora toda Armenia es de Roma. Trajano piensa pasar el invierno donde están. Y en verano, avanzar junto al río a luchar con los partos.

En el puerto de Raphta, Titianus compra mucho marfil. Lo subieron al  barco, lo tapan con telas, pero por su peso excesivo, el barco avanza lento. Un barco pirata los persigue. Marcio le pide flechas a su hija Tamura, les echa grasa, les prede fuego y Tamura dispara contra las velas del barco pirata. Quema todas sus velas. Los piratas apagan el incendio y avanzan con sus remeros hacia ellos. Pero el  barco de Marcio, manejado por Arrio navega cerca de la playa, el barco pirata es enorme y los sigue. Como es profundo, se rompe el barco pirata con las rocas de abajo. El barco de Marcio avanza y se va.

De regreso a 44 A.C., en el extremo oriental del Imperio Parto, Asia central, los diez mil legionarios romanos cruzaron todo Partia a pie. Muchos cayeron muertos en el camino. Llegan seis mil romanos hasta Asia central. Los partos hicieron construir murallas contra los hunos y trabajar en canteras. Luego, los partos los hacen luchar contra los hunos. Resisten bien, pero, tras sucesivos ataques quedan solo 300 romanos. Otro esclavo les cuenta que hay guerra civil entre los hunos. Druso, legatus romano dice deben unirse a ese huno poderoso y los demás romanos lo apoyan.

De vuelta a 115 D.C., en Artaxata, Armenia, Trabajano habla con sus hombres de confianza en una tienda de campaña. Les explica su estrategia, avanzar por los ríos Eufrates y Tigris, dividiendo su ejército en dos. Les explica cómo atacar.

En Partia, Osroes y su hermano Mitrídates, esbozan su propio plan.

En Junio de 115 D.C., Trajano llega a Batnae, capital del reino de Arthemusia. La conquista con facilidad y hace matar al rey. Piensa en dónde estarán los demás partos.

En la mar Eritrea, Titianus habla con Marcio y le dice sospecha de Arrio y sus marineros que están demorando mucho el viaje. Marcio le dice: “Lo estaré observando”. Llegan al puerto de Muza, donde venden telas púrpura refinadas, túnicas cosidas al estilo árabe, vino, trigo, mantos. Titianus vende el marfily les reparte el dinero a todos. Marcio y Arrio van a reclutar marineros y comprar un barco. Alana compra Silphium de Cirene. La vendedora le dice es muy fuerte, si lo usa, tome poco. Demasiado puede ser mortal.

En el río Tigris, mayo de 115 D.C., Lucio Quieto quiere cruzar el Tigris pero hay un ejército inmenso de partos al otro lado. Duda si cruzar o no.

En la Residencia Imperial en Antioquía, mayo de 115 D.C., Plotina conversa con Adriano. Le dice que Serviano, esposo de Paulina, hermana de Adriano, tiene una hija, Julia. Julia se ha casado con Salinator. Plotina le dice que Adriano puede prometer el puesto de emperador para algún nieto de Serviano. Si le promete eso, Serviano le ayudará y será fiel.

En Kasgar, Li Kan ha luchado contra los hunos y le escribe una carta a Fan Chun. Le dice que ha razonado por qué no es ministro Fan Chun. Todos lo observarían. Por eso solo es asistente de un ministro y tiene acceso directo a todos los archivos del Imperio han y acceso a la emperatriz Deng. Le dice debe haber sido estratagema del difunto emperador He. Fan Chun le escribe carta donde dice lo nombra general a Li Kan. En eso, informan a Fan Chun que la emperatriz Li ha muerto. Fan Chun se entera que envenenada. Imagina que fue Yan Ji la responsable y quiere llegar al poder.

En Julio de 115 D.C., en Mesopotamia, Trajano asedia Nísibis y construye con madera de un bosque cercano torres de asedio. Nísibis cae. Le llega correo a Trajano de Lucio Quieto. Le dice que encontró la zona donde cruzar el río Tigris pero hay ejército parto numeroso del otro lado. Piensa que si cruza perderá unos veinte mil hombres, es muy arriesgado. Le pide su consejo. Trajano le contesta el correo, le dice se reunirán para conversar en otro lugar.

Mientras tanto, en el Mar de la India, llega el barco de Marcio con todos ellos a la costa. Tamura le revela el secreto a Ayax en voz baja. Luego se besan.

En Osroene, reciben como rey héroe a Trajano. Pero Trajano se va a Cizre. Allí encuentra a Quieto. Hablan de cómo cruzar el río Tigris. Trajano le dice que hay bosques de madera en Nísibis, más cerca que los bosques cercanos al lago Van. Le dice a Quieto que convoque a los ingenieros de las legiones, habrá trabajo para ellos. Construyen un campamento. Ellos se retirarán hacia Antioquía a pasar el invierno pero volverán con la primavera y cruzarán ese río.

De regreso en el año 43 A.C., en Merv, extremo oriental del Imperio Parto, Druso convenció al líder parto que necesitaba construir una empalizada para protegerse del ataque de los hunos. Les dijeron a los partos que los iban a construir por partes. “Que no haya rendija entre los troncos” dijo Druso. En la noche, los  romanos se fugan con las empalizadas y carros con maderas. Avanzan lo más posible. Llegan al río Oxo, que separa Partia de los hunos. Utilizan como balsas las empalizadas y se van en busca del huno Zhizhi, para unirse a él. Los partos los persiguen pero no cruzan el río. Los romanos encuentran a los hunos y se ofrecen como mercenarios. Zhizhi dice que lo sigan hacia la ciudad de Talas, allí lucharán contra los wu-sun y tal vez con los guerreros del Imperio han. Dice que si combaten bien los premiará. Si huyen del campo de batalla los matará a todos.

Antioquía, Invierno de 115 D.C., a Trajano le informan que ha sido nombrado Parthicus en Roma. Todos sus jefes legatus brindan por eso. Los músicos empiezan a tocar y Arbandes va a danzar. Trajano va al baño. Cuando entra escucha un rugido como de bestia. De repente todo se cae. Aulo está a su lado. Salen por la ventana y se tiran al jardín. Es un terremoto. El palacio se derrumbó. Aulo ve a Trajano con los ojos cerrados y una herida en la frente por donde no para de manar sangre.

Mientras tanto, en Loyang, Zhang Heng, el Astrónomo Jefe, le muestra una máquina a la emperatriz Deng. Sirve para detectar terremotos. Consta en el centro de varios dragones con la boca cerrada. De pronto, un dragón abre la boca y cae una bola metálica que rueda por el piso. Zhang Heng explica ha habido un terremoto en alguna parte. Este prototipo es de hierro. Lo ideal sería hacerlo de bronce. La emperatriz no le ve tanta utilidad. Zhang Heng dice que cuando hay terremotos, en provincias, demoran en avisar. Si detectan rápido el terremoto, pueden provisionar víveres de manera más rápida. La emperatriz le dice puede pedir más dinero para perfeccionar su máquina.

En Antioquía, Quieto, Aulo y Nigrino ayudan a levantarse a Trajano. Se dan cuenta ha sido un terremoto. Se ponen a buscar supervivientes entre los escombros.

En el mar de la India, Tamura les dice el emperador le dijo a ella debían ir a Xeres. Arrio se niega pues dice fue contratado para llevarlos hasta Kushan. “Yo los esperaré” les dice Arrio. Titianus le dice que regresarán en año y medio. “Esperaré dos años”, dice Arrio.

En Antioquía, Trajano ordena todos los del palacio imperial vayan al Circo Máximo. Allí pide consejo a Dión Coceyo que sugiere crear un rumor. Que durante el terremoto una gran fuerza empujó al César por la ventana y lo salvó. Trajano acepta su propuesta. Dice no se irán de allí y ordena revisar todas las legiones. También rescatar y curar heridos.

En Bagram, el consejero Shaka recibe a Titianus, a Mario y a Ayax en su residencia. Les dice que Kadphises ha muerto y ahora reina su hijo Kanishka. Titianus le cuenta que Trajano está en guerra con Partia y espera que los Kushan ataquen Partia por su lado oriental. Luego Roma y el emperador Kushan se repartirán el Imperio Parto. “Hablaré con su majestad el emperador Kanishka” dijo Shaka. Luego, Titianus le pide les facilite viaje a Xeres en misión comercial. Shaka acepta. Alana y Tamura, por ser mujeres, no se les permite hablar con el embajador y esperan en un cuarto. Allí hay mujeres que escriben en sánscrito. Tamura lee y entiende. Hace amistad con una monja de allí, Buddamhitra. Luego, en la noche, Ayax busca a Shaka y le dice no debe dejar pasar a Xeres a sus compañeros porque van en misión de guerra. Luego, le cuenta todo lo que Tamura le contó, el mensaje secreto. Shaka le dice que convendrá matarlos en una semana más.

En Antioquía un judío cristiano llamado Ignacio decía que su Dios había causado el terremoto porque los romanos adoraban dioses falsos. Trajano habla con él y lo condena a muerte, que lo maten en el Anfiteatro Flavio, en Roma. Se lo llevan los guardias a Ignacio.

En Yutian, Li Kan lee una carta de Fan Chun, en la cual le avisa ya es general y le da consejos. Li Kan recuerda las palabras de su padre que le contó sobre la legión perdida, justo le contó esta historia antes de morir: Druso y sus hombres se unieron a Zhizhi y fue una combinación demoledora. Se aseguró el control de todos los valles desde la frontera con An-shi hasta los ríos que desembocan en el gran Pu-Ku. Eso implicaba que el comercio de la seda tenía que contar con ellos. A los han no los atacaba directamente Zhizhi , porque los han tenían a su hijo prisionero. Un día, los han enviaron una embajada a Zhizhi con su hijo para que les dejaran negociar su seda, pero nada salió según lo planeado.

De nuevo en 42 A.C., en Kangchu, reino del huno Zhizhi. Xeres ha enviado embajadores con el hijo de Zhizhi. Los embajadores abren cofres con maravillosos presentes. Zhizhi está bien contento. Todos los hunos con los romanos comen un banquete. Los embajadores chinos también, pero en un momento los hunos matan a todos los embajadores chinos.

En el año 36 A.C., en Ch’ang-an, capital del Imperio han, el emperador Yuan-ti escuchaba a sus ministros y consejeros. Algunos pedían venganza de los hunos, otros decían que había que dejar las cosas así porque se había reestablecido el comercio de la seda. La discusión demoró horas. Lo dejaron así. En Kangchú, el general Chen Tang pide permiso al gobernador Kan Yen para juntar un ejército y luchar contra Zhizhi. Varios de los embajadores eran parientes de Chen Tang, por eso quería vengarlos este general. Hablaron un rato y luego el gobernador sacó el documento. Se lo entrega para que lo dejen salir del Imperio han. Chen Tang logra salir del Imperio han y se va a luchar contra Zhizhi.

Antioquía, marzo de 116 D.C., Trajano le dice a Quieto dejarán una legión en Antioquía para los trabajos de reconstrucción y cuando regresen de derrotar a los partos, todos juntos reconstruirán Antioquía. Pasaron por Edesa y se quedaron a dormir una noche allí. El hijo del rey Abgaro era amante de Trajano. Pero al amanecer, Arbandes va donde su padre Abgaro y le dice ya no quiere acostarse con el emperador. Le dice Trajano se cansa mucho en la cama. Abgaro le dice los partos tienen un gran ejército, que seguro vencerá a Trajano. Cuando regresen Trajano y su gente, te acuestas con Trajano y le cortas la cabeza. Regalarán la cabeza a Osroes y tendrán a Partia de su lado.

En abril de 116 D.C., en Nísibis, Apolodoro ha construido estructuras de madera. Le avisa a Trajano falta una semana más para que traigan el resto de construcciones. Luego, Trajano habla con sus hombres: “En quince días iniciaremos los ataques para cruzar el río”. Trajano les habla que algunos pueden tener miedo al fantasma de la legión perdida. Pero él nunca ha perdido una batalla donde estuviera presente. Para calcular el Plan de Ataque pide traigan un mapa del valle de Cizre y del río Tigris. Se lo llevan de inmediato.

Trajano había enviado cuatro legiones al sur y cuatro legiones a la parte norte del río Tigris. Iban en balsas con remeros parapetados para evitar las flechas, además de escudos grandes para evitar las flechas partas. Los romanos tienen pocas bajas. Abren en sus parapetos ventanas y disparan a los jinetes partos. Los partos dividen su ejército en dos mitades, una al norte y otra al sur. Trajano dice: “Ahora”, y quitan telas de unas armazones que tenían escondidas los romanos, construídas por Apolodoro. Es un puente que van desdoblando sobre el río en su parte central donde no hay partos pero el trecho es más largo. Los partos ven de lejos y se dan cuenta que el norte y el sur son una distracción, efectivamente, las balsas levan anclas y navegan por el río hasta quedar al centro, junto al puente. Los partos disparan flechas al centro a los que arman el puente. Trajano ordena lanzar flechas desde las balsas parapetadas con soldados en la parte central. Aulo está al mando de ellos.

Los romanos terminan de tender el puente. Los jinetes romanos lo cruzan y Trajano quiere cruzar también mientras va dando órdenes. Manda cruzar carros con escorpiones, que son armas romanas, por el nuevo puente.

Mientras tanto, en el Imperio Kushan, Shaka cuenta a Kanishka sobre la embajada enviada por Trajano. Kanishka le dice asesinen a los embajadores de forma discreta.

En el río Tigris, Trajano ya cruzó el Tigris y los romanos están bajando de las balsas. Los partos huyen, menos un grupo al que Trajano ordena rodearlo y hace matar al jefe. Luego, Trajano ordena enterrar a sus muertos y botar al río Tigris cadáveres de partos, que la corriente llevará más abajo y será una bonita forma de saludar al rey Osroes. Quieto lo felicita a Trajano por haber cruzado el río Tigris.

En el Palacio Real de Cesifonte, Osroes critica a su hermano Mitrídates por dejar cruzar el río Tigris a Trajano. Planean sobornar a Abgaro, rey de Osroene. Saben que Trajano se acuesta con su hijo Arbandes. Piensan ofrecer la mano de Aryazate a Arbandes para sellar su alianza.

Mientras tanto, en un bosque al norte de Bagram, en  la primavera de 116 D.C., Marcio con Ayax y guardias reales han salido a cazar un tigre. Ayax le sugiere se adelanten a los guardias porque el tigre puede temer un grupo grande. Marcio sudaba mucho. Había comido de la carne envenenada que le había llevado Ayax. Tenía cansancio. Voltea para hablar con Ayax y ve que Ayax le clava su espada en las costillas. No tiene fuerzas. Ayax le cuenta que fue él quien prendió fuego al barco pero los pretorianos lo sorprendieron. Por eso los mató. Le cuenta que lo ha estado envenenando de a pocos con ayuda de Shaka. Le cuenta que piensa matar a Tamura y a Alana. Marcio le dice que ha rezado a Némesis, que nunca le ha fallado. Deja de respirar Marcio. Un rugido bestial sorprendió a Ayax por la espalda.

Mientras tanto, en el Palacio de Mujeres de la corte, Cesifonte, Rixnu le cuenta a Aryazate que su papá la piensa casar con el príncipe Arbandes, hijo del rey Abgaro de Osroene. Aryazate está contenta porque le dicen es joven y guapo.

En el  verano de 116 D.C., Trajano  regresa con su gente a Osroene. El rey Abgaro le brinda un banquete. Trajano ya quiere acostarse con el príncipe Arbandes, pero éste le dice debe hablar un asunto con su padre. Su padre va a su cuarto y le  da una daga para que le corte el cuello a Trajano. Luego, Arbandes se acuesta con Trajano. Luego que Trajano se duerme, Arbandes va a su  ropa y coge la daga con fuerza.

En Bagram, Tamura estaba más pegad a Ayax, Una noche, ella le clava un cuchillo en el cuello a Ayax y éste empieza a morir. Entonces Tamura le cuenta que ella es amiga de Buddahamitra, una monja, y que ella ha escuchado a Shaka hablar con Kanishka que Ayax ha matado a Marcio, y que planeaba matar a todos ellos. Un guardia le cuenta sobre la cacería a Tamura. Ella estuvo vigilando a Ayax y vió que echaba un líquido al vino que le servía en una copa a Titianus. Descubrió dónde escondía el líquido y lo vertió sobre un trozo de carne que hizo comer a tres gatos de la calle. Los tres gatos murieron en el acto. Así se dio cuenta que era verdad, Ayax planeaba matarlos a todos. Luego, Ayax muere. Tamura vomita y está embarazada de Ayax.

A Cesifonte, capital de Partia, llega un mensaje del rey Abgaro, que dice: “Trajano ha muerto”. Osroes pregunta: “¿Estás seguro de ello? Quiero pruebas.” Lo ha matado el príncipe Arbandes, pero ahora necesita el ejército parto porque en Osroene hay varias legiones romanas. Osroes envía un mensajero a Osroene en que dice enviará refuerzos.

En Asia Central, Alana encontró a Tamura junto al cadáver frío de Ayax. Tamura le contó todo. Tamura buscó a Buddamhamitra para pedirle ayuda. Ella tenía contactos y le dio buenos caballos con los que salieran de la capital, Tamura, Alana y Titianus. Llegaron a la frontera con Xeres pero los guardias ordenados por Kanishka, ya tenían orden de no dejarlos salir. Pero los tres se fugan y con perseguidos. Alana les dice por dónde cambiar de ruta para despistarlos, pero los perseguidores les lanzan flechas. Una alcanza a Titianus. Otra a Alana. Llega la noche y descabalgan. Tamura le dice a Alana que Titianus parece muerto. Tamura le quiere quitar la flecha a Alana pero ella le dice es mortal. Le dice que vaya a Xeres. Tamura le dice está embarazada de Ayax. No lo quiere tener. Le dice Alana que tome un frasco de su bolsa, es silphium. Impregne una manta de lana con un poco de silphium y se lo ponga dentro. Y ese niño no nacerá en su vientre. Se aplica el silphium. Y luego logra dormirse.

En el río Eufrates, Trajano se da cuenta Arbandes se levantaba y lo vio con un hermoso puñal. “¿Qué es eso, Arbandes?”, le preguntó. Arbandes le dijo que era un regalo para él. Más tarde, Trajano se reúne con sus hombres de confianza y planean cómo conquistar la ciudad de Cesifonte, donde está Osroes. Necesitaban los barcos y por el desnivel no podían unir el río Tigris y el río Eufrates. Apolodoro de Damasco, ahora hombre de confianza, les explica puede construir máquinas que arrastren los barcos por tierra.

En Cesifonte, Osroes habla con su hijo Partamaspates y le explica los romanos están trayendo barcos en carros, arrastrándolos con caballos y fuerza de hombres. Osroes le dice que deben huir. Ya se vengarán luego. Le ordena que los eunucos maten a todas sus esposas y sus hijas porque las mujeres hacen perder tiempo al huir. Matan a todas las mujeres pero Aryazate logra huir y esconderse.

En Asia Central, en la zona de los han, Tamura despierta con el sol en alto. De repente, vienen veinte jinetes kushán contra ella. Saca su espada y pelea con uno de ellos, lo mata. Luego mata a otro. De repente ve que otros caen muertos con flechas. El resto de jinetes kushán huyen. Llega un ejército de miles de chinos, del Imperio han. Llaman al general Li Kan y hay un intérprete. Tamura con su espada cava un hueco en la tierra y entierra a su madre. Explica al intérprete que ha enterrado a su madre. Li Kan pone un trozo de bambú encima de la tumba y le prende fuego. Tamura ve eso y da una patada al bambú. Luego se desmaya y sangra entre las piernas. Antes le dice al intérprete que es embajadora del Imperio Da Qin, le habla en sánscrito.

Mientras tanto, en Cesifonte, Partia, la flota de Trajano surca el río Tigris. Tras la gigantesca embarcación del César llegan cincuenta naves llenas de legionarios armados. Aryazate es hallada por Quieto, el cual la lleva a Trajano. Ella le dice es la princesa Aryazate, hija de Osroes. Ella le cuenta fue orden de su padre matar a todas las mujeres y niños. Pide dos cosas: Que Trajano abandone Partia. Trajano le dice que no hará eso. Y lo segundo, que el emperador capture a su padre y lo mate ante sus ojos. Trajano le garantiza eso. En otoño de 116 D.C., Trajano llega a Carax, en el Golfo Pérsico con su flota imperial. Trajano piensa si conquistar Kushan y luego Xeres. 

De regreso a otoño de 36 A.C., en Asia central, el general Tang le explica su plan de ataque a Kan Yan contra Zhizhi. Va a rodear la cuenca del río Tarim. Una parte de su ejército irá por el sur y otra por el norte. Pasan los días y su ejército avanza, pero empiezan a escasear los víveres. Una mañana, el ejército de Chen Tang encuentra jinetes de Kangchú y llevan mucho ganado con ellos. Pelean con ellos y pactan con los que quedan. Les quitan su ganado. En la fortaleza de Kalas, en Kangchú, Druso entra con sus hombres donde Zhizhi y le explica que los han están acampando afuera de su fortaleza. Le explica que es un primer grupo del ejército han. Se ha informado que vendrán cuarenta mil guerreros y no podrán derrotarlos. Le propone luchar contra los que acaban de llegar, no son tantos y pueden derrotarlos. Eso asustará al resto.

Zhizhi y parte de su ejército salen a luchar pero los han están bien entrenados y no logran vencerlos, tienen muchas bajas. Se regresan a su torre de empalizada. Los  romanos han estado mirando todo desde la torre. Druso dice que saben dos cosas: Que el general de los han es valiente y que el general han no esperará el invierno para atacar. Atacará en cuanto lleguen sus refuerzos.

La segunda división de los han llegó a la semana siguiente. Los romanos habían construido fosas de agua junto a la empalizada, de manera que los han no pudieran trepar. Pero los han cavan desvío de sus aguas a otro lugar y se desvía el agua. Luego disparan flechas con fuego sobre su empalizada de madera y se incendia la empalizada. Los arqueros han disparado flechas y matan a muchos hunos. Zhizhi ha sido herido y se ha retirado al sector amurallado. Vienen dos mil o tres mil jinetes de Kangchú a reforzar a Zhizhi. Pero los han idean una táctica. Cuando se acercan los jinetes golpean objetos metálicos fuerte con ollas, se oye un ruido inmenso. Los caballos de los jinetes se vuelven locos y botan a sus jinetes. Entonces el general Tang ordena que les disparen flechas. Y los jinetes huyen. Eran sogdianos. Tang ordena incendiar la fortaleza de Zhizhi. Salen gateando Zhizhi y sus mujeres y soldados. Los llevan al centro de la plaza los han. Tang decapita a Zhizhi y ordena matar a todos los de palacio. Perdona la vida a los artesanos y comerciantes de la ciudad. Un mensajero le avisa ya encontraron a los mercenarios que serán unos 300 hombres. Nosotros somos 39 mil hombres, dice Tang. Le avisan que los mercenarios no se rinden.

De nuevo en noviembre de 116 D.C., Trajano entra en Babilonia, habla con Aryazate que le explica las maravillas del mundo. Le hace leer escritos de Alejandro Magno. Pasaron varios días que Trajano se relajó en Babilonia, mientras recibía informes de las provincias. Hacen sacrificios de bueyes a los dioses romanos. Llega un mensajero que avisa hay un levantamiento general en toda Mesopotamia. En Osroene también.

En el Palacio Imperial de Bagram, el emperador Kushan, Kanishka dice: “La joven escapó”. Shaka le dice que la violarán y volverán esclava seguramente. Kanishka lo manda matar por inútil.

Mientras tanto en la frontera entre el Imperio Kushan y el Imperio Han, otoño de 116 D.C., el aborto ha tenido varios días en cama a Tamura. Luego le volvió el apetito y comió arroz que le ofrecieron. Los médicos habían dicho que moverla en aquellas condiciones podía terminar con su vida, por eso, Li Kan decidió esperar que se recupere. De repente, vinieron jinetes kushán, Tamura cogió sus flechas y su arco y estuvo disparando contra ellos. Luego se fueron los kushán. El intérprete le dice a Tamura irán a Loyang, la capital del Imperio han.

Mientras tanto en Osroene, Lucio Quieto hace caer la ciudad. Trajano le había dicho antes que él debía quedarse allí esperando a Osroes y su gente. Sería la batalla decisiva. Quieto tenía que poner orden en Osroene. Quieto mata a Abgaro y a Arbandes.

En Antioquía, Siria, Adriano habla con Atiano. Le cuenta subirá los impuestos y le creará problemas a su tío Trajano. Luego, él tratará de ser emperador.

En Loyang, Tamura llega con Li Kan y cien guerreros. El resto se quedaron en Ch’ang-an. La envían a ser bañada por dos siervas. Le traen ropas. Se pone un pantalón rojo, una capa roja y un cinturón. Se ve muy bonita. La llevan donde Li Kan. A Li Kan le gusta. El la lleva con Fan Chun. Hablan en sánscrito. Ella le explica lleva un mensaje para el emperador. La llevan y se sorprende al ver a la emperatriz Deng, no pensó una mujer gobernara Xeres.

En Cesifonte, Quieto le avisa a Trajano ha matado a Abgaro y a Arbandes. Y Trajano les dice unas palabras a sus hombres: “Si en algún momento me pasa algo en la  batalla, Lucio Quieto  asumirá el mando absoluto en la contienda y en la campaña si es necesario”. De repente, Trajano se llevó las manos a la sienes y exclamó un grito ahogado: “Aaahh”. Aulo lo sujetó y lo hizo bajar del caballo. Lo llevaron a una tienda. El médico dijo necesitaba descanso. Los guerreros romanos tuvieron miedo porque ya venían los partos al frente. Quieto les dio un discurso de motivación. Y lo terminó diciendo: “Por el emperador, por Trajano”. Y se lanzaron a luchar.

En Loyang, la emperatriz Deng hace varias preguntas a Tamura. No le cree que es enviada del emperador de Roma. Tamura le muestra la estatuilla de Júpiter pero ella no se convence. Entonces Tamura pide un envase con agua. Se lo traen. Rompe la estatuilla de barro y dentro saca un rubí rojo de gran tamaño. Se lo entrega a la emperatriz como obsequio. Le cuenta que viajaron un grupo pero solamente ella ha llegado viva a Xeres. La emperatriz le dice que hasta decida qué respuesta dar al emperador, será tratada como embajadora de Da Qin.

En Cesifonte, Quieto gana la batalla y le muestra la cabeza cortada de Sanatruces, el hijo de Mitrídates a Trajano. Mitrídates se ha dado a la fuga con un grupo pequeño. Partamaspates y unos cuantos se han rendido. Trajano está sentado en su cama. Dice deben recuperar Hatra, donde está Osroes. Irán con todo su ejército hacia allá.

En Roma, en el anfiteatro Flavio, Ignacio es arrojado a los leones. Está orando. Luego de un rato, se lo comen. Hay cristianos en las gradas del anfiteatro y comentan sobre el libro de Marción sobre la vida de Jesús.

Hatra, marzo de 117 D.C., Quieto le explica cómo está construida la doble muralla de Hatra a Trajano. La muralla es de tierra apelmazada, luego hay zanjas o fosos. Y hay una segunda muralla de piedras. En estas hay cuatro grandes puertas fortificadas, una al norte, otra al sur, otra al oeste, otra al este. Hay más de ciento sesenta torres con arqueros. Luego de dicha explicación, planifican cómo conquistar la ciudad, si por el hambre, la sed, etc. Deciden cavar junto a la muralla de tierra, logran hacer parte de la muralla de tierra. Trajano va en su caballo con Aulo detrás de él hacia donde cavan para dar ánimos. Les habla y les dice nunca ha sido derrotado. En ese momento los arqueros de las torres les disparan un montón de flechas. Y Aulo lo protege con su escudo a Trajano pero le cae una flecha a Aulo y muere. A Trajano lo roza una flecha. Regresa más atrás. Quieto le lee una carta de Adriano en la que dice los cristianos se han rebelado. El Senado Romano reclama su regreso de las legiones para poner orden. El asedio a Hatra tendrá que esperar.

En Antioquía, abril de 117 D.C., Trajano reprende a su sobrino por no tener capacidad para el cargo. Trajano le dice Adriano no le sucederá como emperador. Adriano le dice que no nombre a Lucio Quieto porque sería un error. “Casarte con Vibia sí fue un error”, le dice Trajano. “Sal de aquí” le dice Trajano. Y Adriano se va. Llora solo un rato Trajano. Luego llama a su secretario Fédimo. Fédimo va a llamar al médico Critón.

De nuevo en otoño de 36 A.C., en la Fortaleza de Talas, los guerreros han de infantería vienen con heridas, no pueden derrotar a los mercenarios. Deciden pactar. Druso y Tang pactan que los mercenarios cuidarán las fronteras del Imperio han por diez generaciones. Les enviarán alimentos y mujeres. Tienen bosque con maderas para construir un campamento estable. Luego llevan a los mercenarios a cruzar la Gran Muralla China y los romanos se quedan allí.

De nuevo en Julio de 117 D.C., Trajano, en Selinus, costa de Silicia, miró una puesta de Sol por última vez. El 9 de agosto de 117 D.C., Trajano estaba en cama Plotina había enviado a  todos fuera y envenenaba a Trajano. Viene Adriano y le dice lo mate esa noche. Se va. Plotina echa veneno en la sopa y se la da en cucharas a Trajano. Trajano muere.

El secretario Fédimo despacha cuatro soldados pretorianos con cartas urgentes. Adriano ha llegado con cohortes que matan a Liviano y a Fédimo. Luego habla con Critón, el médico, que dice la muerte de Trajano se debió a que la sangre no fluía bien por su cuerpo. Adriano le dice eso debe escribir y contar al Senado. Adriano con Plotina han falsificado un documento donde Trajano lo nombra nuevo César a Adriano. Atiano está en un barco y le recomienda matar a Celso, Palma, Nigrino y Quieto.

En Loyang, verano de 117 D.C., Tamura ve a Yan Ji echar un frasquito con líquido a la tetera de la emperatriz. Fan Chun no estaba. Tamura está segura que le ha echado veneno. Los guardias llevan la tetera y tazas en una bandeja para la emperatriz. Tamura habla en sánscrito y nadie le entiende. Le avisan a Li Kan. El le dice mejor vaya a sus habitaciones. Entonces Tamura hace gestos como echando algo a la tetera y luego hace gestos de muerte. Li Kan ordena la lleven a su habitación pero se queda mirándola.

Nigrino lee la carta de Fédimo donde avisa Trajano ha muerto. Escribe una carta para reunirse con Celso y Palma. En Lida, Quieto asedia la ciudad. Le llega la carta de Fédimo. Entra a su tienda de campaña y se pone a llorar. Se entera Trajano ha muerto.

En Loyang, verano de 117 D.C., Tamura habla en griego y no le entienden. Habla en latín y Li Kan le entiende. Dice: “La emperatriz va a ser envenenada”. Li Kan ordena la suelten. Luego ella añade en latín: “La bebida de la emperatriz ha sido envenenada por Yan Ji”. Li Kan se mete a buscar a la emperatriz. Llega donde ella y le dice algo. Entonces, la emperatriz deja la taza en el suelo. Un gato se bebe el té. Da unos pasos más y cae muerto.

En el Imperio Romano, Nigrino es asesinado. Celso es ahogado en las termas. Y a Palma lo abaten con flechas y luego le clavan una espada.

En Selinus, Cilicia, en octubre de 117 D.C., Adriano le avisa a Aryazate que la devolverá con su padre que se la ha pedido. Ella le pide no la devuelva, pero Adriano ordena devolverla.

En el sur de Judea, en noviembre de 117 D.C., Adriano ha enviado dos legiones enteras con Atiano reclamando a Quieto. Pero Atiano ve que de pronto aparecen un montón de hombres por el lado de Quieto y se preocupa. Quieto le dice le acompañará pero primero se despedirá de sus hombres.

En Loyang, la emperatriz y Fan Chun felicitan a Tamura por su buena acción y por el regalo del emperador. Fan Chun le traduce y le dice tiene tres opciones: Saben que en Da Qin el emperador está enfermo o ha muerto. Hay nuevo emperador. Puede elegir regresar con un mensaje para el nuevo emperador. La segunda opción es permanecer en la corte a su lado, donde será respetada y podrá seguir aprendiendo su lengua y su cultura. Hay una tercera opción. Tamura no sabe qué  decidir.

En el sur de Judea, sus hombres le dicen a Quieto luchará por él. Y sus 300 guerreros luchan contra las dos legiones, pero Quieto es derrotado. Se suicida.

En Loyang, le dice Fan Chun la tercera opción es casarse con Li Kan que ha hecho ese pedido a la emperatriz. Tamura lo piensa y acepta. Salen todos pero la emperatriz le pide se quede a Li Kan. Le pide trate bien a su futura esposa. “Es una tigresa”, le dice.

Otro día, Li Kan, ya casado con Tamura, va donde Fan Chun y le pregunta por qué lo han elevado tanto de rango a él. Fan Chun le dice por sus acciones militares. Pero le revela también que Li Kan es el último descendiente de Druso, de la legión perdida. Y Fan Chun es el último descendiente del general Tang. Y ambos guerreros hicieron amistad en el pasado. Le pide guarde el secreto. Que se vaya a trabajar en la frontera con su esposa. El nuevo emperador, si Li Kan trabaja bien, no se meterá con él.

En Drobeta, Dacia, los legionarios le prenden fuego al puente que construyó Apolodoro, por orden de Adriano.

En Cesifonte, Osroes habla con Aryazate y le avisa la casará con Vologases para tener paz en Partia. Se la llevan y demoran dos meses en llegar donde Vologases. Aryazate descubre que Vologases es guapo. El le cuenta que él es el legítimo heredero al trono de Partia. Aryazate le pide no la devuelva a Osroes. Este querrá casarla por interés. Vologases la ve valiente y se entera que ella odia a su padre. Le dice que se va a casar con ella y que lucharán por derrotar a Osroes juntos.

En Roma celebran el triunfo de Trajano, hacen exhibición de una estatua gigante de Trajano en oro, traen esclavos, el botín, el trono de oro de Partia, cofres con joyas, bueyes blancos para ser sacrificados y las cenizas de Trajano. Menenia sale de su casa y se abraza con Celer. Ya dejó de ser Vestal Máxima. Se pone a llorar.

Debajo de Roma, en un lugar secreto, Alejandro, el obispo de Roma y Telésforo hablan de escribir un libro con la vida de Jesús y cartas de los apóstoles, un libro que reemplace al libro de Marción que dicen puede ser del demonio.

Todos los legionarios desfilan en el Circo Máximo. Menenia y Celer se van a la villa donde vive su madre Domicia. Allí beben  vino y conversan en paz.

En el Imperio han, Tamura está embarazada y le lee a Li Kan libros de Julio César.

En 129 D.C., Doce años después de la muerte de Trajano, en Cesifonte, Aryazate le corta la cabeza a su padres Osroes. Viene Vologases y le dice a Osroes: “Tienes una hija fascinante”.

FIN

Adriano mandó matar al arquitecto Apolodoro de Damasco también. Eso no se cuenta pero fue real.




sábado, 5 de diciembre de 2020

 

Dejarás la Tierra

Hola amigos, he terminado de leer la novela titulada “Dejarás la Tierra” del escritor peruano Renato Cisneros. La novela narra la historia de sus antepasados del escritor, aunque encontrarán que siempre los asocia con personajes famosos. Siempre sus parientes han conocido a Miguel Grau, a Ricardo Palma, han tenido problemas por criticar a Augusto B. Leguía, etc. La historia empieza el 2013, cuando el autor con un tío llegan al  cementerio para verificar donde está el esqueleto de su tatarabuela Nicolasa Cisneros. El autor está son su tío Gustavo Cisneros. Encuentran en la tumba de al lado, la tumba de Dr. Gregorio Cartagena. Cura de Huácar. 1865. Luego, se van juntos a una tabena a conversar ambos. El tío Gustavo le cuenta al autor la historia de Nicolasa. En Huánuco, en 1824, Nicolasa Cisneros era amante del cura Gregorio Cartagena. Y tuvieron varios hijos juntos. Nicolasa inventó la historia de un esposo ficiticio de apellido Benjamin que paraba de  viaje y no podía ver a sus hijos. Tuvieron 7 hijos juntos. Todos vivían con Nicolasa, Cartagena le apoyaba consiguiéndole vivienda y algo de dinero. Nicolasa colaboraba con San Martín y Bolívar. El séptimo bastardo de Nicolasa fue Luis Benjamin Cisneros, y fue el bisabuelo del autor. Pedro Cisneros, hermano de Nicolasa, era militar. No sabía que Cartagena era pareja de Nicolasa, pero se llevaba bien con él, porque Cartagena consiguió un decreto que daba una pensión a los militares que habían combatido para el ejército libertador, y esa pensión le caía a Pedro. Llegó el gobierno de Ramón Castilla, y Luis Benjamín Cisneros ya estaba grande, joven. Y vio un día a la amante de Castilla. Se enamoró al verla. Luego de un rato, cuando Castilla estaba ocupado por otro lado, se acercó a ella y se le declaró. Se volvieron amantes. Tuvieron juntos tres hijas. Luis Benajamín Cisnero ocupó un cargo público y ganaba bien, pero era también poeta, y escribía para periódicos. La amante de Castilla se llamaba Lucrecia Colichón y era muy bonita. Ella le exigió a Luis Benjamín que se casaran pero él temía a Castilla, porque Lucrecia no había querido seguir siendo amante de Castilla. Luis encarga a su mamá que cuide de sus tres hijas, ella le apoya para que vaya a Francia a volverse escritor de poesía y novelas. Luis se va. Está unos años allá y envía una novela a Perú, se la publica una editorial. Empieza a tener éxito como escritor, publica poemas también. Luego de años regresa al Perú, y conoce una chica joven de pelo medio naranja, es una chica muy bonita, sobrina de un amigo francés. Se casa con ella y tienen varios hijos. Sus tres hijas mayores no le perdonan haya abandonado a su madre. Ocupa varios cargos públicos, por su prestigio como escritor. Dos de sus hijas mayores lo buscan y le piden perdón cuando es viejo. Luego de sufrir de la enfermedad de Parkinson, muere Luis Benjamín Cisneros. Todos los hijos de Nicolasa sospechaban eran hijos del cura Cartagena, y que no existía el tal padre Benjamin, pero para no molestar a su madre no decían nada. Cartagena al morir le deja en herencia a Nicolasa su hacienda. Pero ella no se instala a vivir allí para evitar comentarios. Pero la lega a sus hijos. Ella también muere y pide ser enterrada junto a Cartagena. Uno de sus hijos de Luis Benjamín, Fernán Cisneros, se vuelve escritor también y periodista, llegó a director del diario La Prensa. Desde allí criticaba al gobierno y eso le trae problemas con Augusto B. Leguía. Lo envían a Panamá, lo deportan. Tiene una esposa peruana y una amante. De su amante tiene al hijo que a futuro será el Gaucho Cisneros. No les puedo seguir contando para que no pierdan la emoción de leer la novela.



lunes, 23 de noviembre de 2020





 

¿Qué es el Branding y por qué es importante?

El Branding es el estudio de las marcas y de su gestión. Esto abarca desde su creación, lanzamiento y desarrollo en el mercado, por parte de la empresa. Ahora bien, las empresas pueden tener una o varias marcas. Hay maneras de gestionar cada situación de empresa, para un mejor control de las marcas. Es importante porque de la fortaleza o poder de una marca depende que se convierta en la marca predominante, líder del mercado, una marca competitiva; o una marca seguidora, o tal vez, una marca en extinción. Cada tipo de marca recibe un trato diferente para su gestión, de manera que pueda crecer lo máximo posible en su etapa en que se encuentre dentro de su ciclo de vida.

Es importante que la marca crezca y se vuelva poderosa para poder enfrentar a la competencia. En estos tiempos, vienen al país las compañías extranjeras y, como tienen grandes capitales, te quitan los clientes, dejando a tu compañía en la quiebra. Es necesario que la empresa cree barreras para ello. En el Webinar de Branding, les enseñaré cómo pueden generar valor para lograr enfrentar a los competidores. Podrán aprender que el Branding exige  que los dueños de empresas piensen un montón para resaltar en medio del mercado.

Es importante que no se dejen sorprender por términos como Arquitectura de marca, que es lo mismo que Desarrollo de Marca. Son consejos para llevar una mejor gestión de las marcas.

Verán en los ejemplos y casos que, si sus marcas son fuertes, crearán lealtad por parte de los consumidores. Si sus marcas son débiles, los consumidores apenas les ofrezcan algún regalito los competidores, los abandonarán, y perderán mercado ustedes. A igualdad de proveedores, escogerán a quien les brinde mayor valor. El valor lo tienen que crear ustedes. Y no es tan simple como un regalito. Antes había en el mercado peruano un Chocolate Juguete de Motta. Era un chocolate que venía con un juguete dentro, y costaba algo más caro que los demás chocolates. O sino venía un juguete, venía un sticker. Pero ese detalle, atraía niños. Y los niños les pedían a sus padres que les compraran ese Chocolate Juguete de Motta. En mi Webinar aprenderán herramientas más avanzadas para generar valor en sus productos o servicios. Prepárense para aprender el Branding, toda la gestión de marcas en serio...conmigo. 

lunes, 7 de septiembre de 2020

El pez en el agua

 

Este libro es sobre la vida de Mario Vargas Llosa y su trajinar como político en el  Movimiento Libertad. Narra la historia de su vida y de cómo postuló para Presidente del Perú. Inicia contando, que su mamá a comienzos de 1947 lo llevó al malecón Eguiguren y le dijo su papá no estaba muerto. El se había criado con su mamá, sus tíos y tías, sus abuelos. Su padre había sido radio operador de una compañía aérea, un trabajo estresante, y paraba de mal humor. Su padre, de más joven, se había ganado la lotería, solo 50 000 soles, lo que le tocó de los huachitos, y viajó a Argentina. Llevó una vida disipada allá y se gastó todo. Su papá y su mamá se conocieron en Tacna, en el aeropuerto. Su mamá había viajado con su abuelita al matrimonio de un pariente. Y le presentaron al operador de la compañía Panagra, el Sr. Vargas. Le gustó su papá a su mamá. Al año se casaron, pero luego se divorciaron. Ella le contó que le había puesto de nombre Mario a su hijo. Su papá tenía mal carácter, decía que la familia de su mamá lo había criado como niñita. Decidió meterlo al Colegio Leoncio Prado. Allí, Mario aprendió muchas cosas. Leyó a muchos escritores famosos. Se había criado mas antes en Bolivia porque la familia consiguió trabajo por allá. Pero cuando llegó su papá, le empezó a pegar a Mario y a su mamá  de vez en cuando. Mario le pedía su mamá que mejor se escaparan. Pero ella le decía su padre era trabajador y honrado. Que no iba a fiestas ni despilfarraba el dinero. Que le era fiel a ella. Mario había estudiado los primeros años de secundaria en el Colegio La Salle. Allí, cuando fue un fin de año, un profesor Leoncio, lo llevó un día que no había clases al último piso, donde su cuarto, le mostró revistas de mujeres desnudas y le empezó a tratar de bajar la bragueta del pantalón, mientras le acariciaba el pene por encima con su mano. Mario le dijo: Suélteme, y se escapó corriendo. Al año siguiente lo vio algunas veces. Luego se fue al Leoncio Prado. Allí encontró que a los nuevos los bautizaban con patadas y que se calatearan. Aprendió la costumbre que tenían allá los alumnos, de Tirar Contra, que era escaparse por una pared baja a la calle en la noche a comprar cigarrillos. Los más valientes iban, y él también fue. No lo atraparon nunca, le fue bien. Eso de Tirar Contra les daba buen prestigio. Cuenta que fue con un amigo al Jr. Huatica a buscar prostitutas. Cuenta también que empezó a escribir poesías para los amigos, para sus enamoradas. Le pusieron de apodo Bugs Bunny por sus dientes grandes, y también Poeta, porque escribía poesía para los amigos. En las vacaciones de verano iba a la playa a correr olas con los amigos. También le ayudaba trabajando a su papá en su oficina del centro de Lima. Como lo enviaba al diario La Crónica, le entró en la cabeza ser periodista a Mario. Le habló a su papá y éste le dijo hablaría con el director del diario para que lo admitieran el próximo verano, en su cuarto de media. Así que cuarto y quinto de secundaria en los veranos, trabajó en el diario La Crónica. Empezó a reemplazar a unos de los redactores de la Crónica. En esa época leyó mucho novelas, el Ulises, que no lo entendió bien. Aquel verano vio por primera vez un cadáver. Lo enviaron a hacer un reportaje a provincias, y tuvo un accidente. Salió por la ventana del carro y cuando recobró el conocimiento, estaba viajando de vuelta a Lima con otro colega, de piedad de unos señores del auto. Lo enviaron a la Clínica Maisón de Santé. Un día despertó y vio a una chica prostituta que había frecuentado él, con la que salía a veces, y se besaban en el cine a oscuras, pero vio luego aparecer a su padre, ella vio su faz de Mario y se fue. Su papá lo había ido a visitar. Cuando se recuperó, su padre lo llamó a su oficina para que hablaran y le dijo buscara donde terminar su quinto de secundaria. No se acostumbrara a la vida nocturna de Lima. Mario llamó por teléfono a Piura a su tío Lucho y éste le consiguió un colegio en Piura donde terminar su quinto de secundaria, y se preparó para recibirlo junto con su tía Olga. Para allá se fue Mario. Lo recomendaron para diarios de Piura. Estudió su quinto de secundaria en el Colegio San Miguel de Piura y tiene buenos recuerdos de esa época. Trabajaba en el diario La Industria. Su tío Lucho había estado trabajando de contrabandista exportando caucho a Argentina, pero lo descubrieron. Cuando Mario llegó a Piura, estaba trabajando de agricultor y tenía peones. Mario escribió una obra de teatro: La huida del Inca, y la envió a un concurso. Y ganó el premio. Se gastó el dinero en libros y en la Casa Verde, un prostíbulo. Mario acompañó a su tío Lucho a Tumbes para explorar un negocio de pesca. Viajaron juntos a varios sitios donde podían instalar el negocio. Su tío Lucho lo animaba a Mario a ser escritor. El año siguiente, postuló a la Universidad de San Marcos e ingresó. Luego fue a vivir con ellos su tía Julia, hermana menor de su tía Olga, esposa de su tío Lucho. Mario se sintió atraído por ella. El la acompañaba al cine, iban juntos y conversaban. Mario se le declaró y se fugaron para casarse en provincia. Lo narrado en La tía Julia y el escribidor, es parecido a la realidad. La tía Julia era divorciada. Pero Mario tuvo que conseguir varios trabajos tipo cachuelos para poder mantener el hogar. Julia le tipeaba sus escritos en la máquina de escribir. Después se hizo famoso como escritor Mario. Y se divorció de su tía Julia. Se casó con su prima Patricia. Tuvo sus hijos. Los de Acción Popular y los del PPC lo buscaron a Mario para las elecciones de 1990, para que postulara para Presidente del Perú. Lo apoyaron en su campaña, le consiguieron economistas de las mejores universidades del mundo y profesionales de la élite intelectual para que le hicieron su Plan de Gobierno. Era toda la derecha peruana que lo apoyaba. Le hicieron su campaña política, Mario viajó por todo el Perú, en la primera vuelta quedó como contendiente con el Ing. Alberto Fujimori, que tenía respaldo de los grupos evangélicos del Perú. En la segunda vuelta ganó Fujimori. Mario se enteró luego que Fujimori aplicó el shock, que dio su autogolpe de Estado. Se quedó pensando en el futuro del Perú. Es bueno lean este libro para que aprendan de la Historia del Perú, de esos años 1980s y 1990s.


 

miércoles, 29 de abril de 2020


Los ríos profundos

He terminado de leer la novela titulada “Los ríos profundos” del escritor peruano José María Arguedas. La novela narra la historia de Enrique, un joven adolescente que viaja con su papá que es abogado al Cusco para visitar a un tío de su papá. Su padre le va diciendo es un hombre malo aquel tío. Lo visitan en el Cusco. Luego, su papá consigue un trabajo lejos, y envía a Enrique a estudiar su secundaria en un colegio de Abancay. Así es que llega al colegio Enrique y lo llaman el forastero. Se hace de amigos. Juegan al trompo, al que llaman Zumbayllo. Hay dos chicos malos en su colegio, Lleras y Añuco. El colegio quedaba cerca de un río el Pachachaca. Había una mujer loca que vivía por la zona de la cocina del colegio, le llamaban la Opa. El Lleras y Añuco le levantan el vestido a la Opa y se la ofrecen a Palacitos, un alumno joven. El Palacitos no quiere tener nada con ella. Se burlan de él los otros dos. Un alumno, Antero, juegan bien al trompo y le regala un trompo a Enrique, un Zumbayllo muy bueno. Tenían día de salida los sábados, pero Enrique no siempre salía porque su papá no estaba en la ciudad. Una noche, mujeres vienen a la zona reclamando sal y traen costales de sal. Habían robado sal. Eran mujeres que vivían del negocio de la venta de chicha, les llamaban chicheras. En el colegio la mayoría de chicos hablaban quechua, o lo entendían al menos. Eran pocos los que no lo hablaban. A Enrique le gustaba cuando cantaban en quechua. Esa noche del robo de sal, Enrique salió a la calle y se fue con las chicheras caminando con la sal. Fue hasta una zona un poco lejos a pie con ellas. Se encontró con un músico que había conocido mas pequeño, amigo de su papá, y se acordaba de él. Este le cuenta cosas de su trabajo. Pero luego los del colegio lo mandan buscar y lo traen de regreso a Enrique. Le pegan con fuste un rato por fugarse. Luego lo mandan acostar porque es de noche. Enrique se da cuenta de cómo viven los indios en Abancay. Y se compenetra con ellos. Pero algunos de sus compañeros le dicen es un indio blanco, porque era de piel blanca con ojos azules. Pero sus rasgos no eran de persona blanca netamente. De repente aparece una peste por Abancay, nadie sale de sus casas por temor a contagiarse. Había un chico en el colegio, Peluca, le decían. A él le gustaba la Opa. Quería tener sexo con ella, pero no podía porque las cocineras la cuidaban. Una noche le avisan a Enrique que la Opa está enferma parece. El tenía buenas relaciones con las cocineras y lo dejan verla. La Opa está en cama, y tiene piojos en el pelo. Muere. Suponen de la peste. El director del colegio ve cuando Enrique la carga para llevarla a otro sitio del colegio. Le ordena dejarla. El director, con dos hombres, la cargan con frazadas y sabanas a la Opa muerta y la llevan cargando a otro lugar. Luego de un rato, la examinan y el director dice la Opa murió de paro cardiaco, no de la peste. A Enrique le ponen kreso en el pelo, se lo mojan y le ponen una toalla en la cabeza. Lo desnudan y lo meten en su cuarto bajo la frazada. Le dicen es para prevenir por si la Opa le había contagiado la peste. El portero, antes de irse del pueblo, le había contado a Enrique que él sí había tenido sexo con la Opa y que tenía fiebre, iría a morir a su pueblo. Enrique está en su cuarto y le han echado llave. En un momento, alguien debajo de su puerta le pone dos monedas de un sol de oro y un papel. Es Palacitos. Se despide de él a través de la puerta en voz baja. Le dice ha terminado sus estudios secundarios y se va con su papá. Se va. Enrique recoge los dos soles de oro, y el papel que dice que si está sano se lo gaste y lo utilice para medicinas si está enfermo. Enrique se había hecho querer entre sus amigos. Antes, al Lleras, que había jugado fútbol con los profesores y alumnos, había insultado a un padre negro. Le había dicho negro de mierda. El padre negro le rompió la nariz. Expulsaron al Lleras del colegio. Enrique se pone bien de salud, no tenía la peste. El director del colegio decide enviarlo donde su tío del Cusco. Su papá de Enrique lo había recomendado para que fuera allá. El también iba a ir allá. Puede irse a pie si le indican la ruta. Era fin del año escolar. Y entonces Enrique sale para ir al Cusco a pie. Allí termina la novela. Algunos detalles son que Antero le pide a Enrique que le escriba una carta de amor para su amada Alcira. La novela hace uso de intensa descripción de la naturaleza del lugar. Espero les guste. Se la pueden comprar. Hay varias partes en que usan quechua para terminar la conversación.



viernes, 20 de marzo de 2020


La Babosa

He terminado de leer la novela titulada “La Babosa” del autor paraguayo Gabriel Casaccia. La historia empieza narrando a Ramón Fleitas es un abogado provinciano que trabaja ejerciendo su carrera y se había casado con Adela, hija de un dueño de estudio de abogados. Hacía seis meses que se habían casado. Ramón está despierto en la noche escribiendo su novela. Sentía envidia de otros abogados nacidos en Asunción, mientras él había nacido en provincia, en Itacurubí. Estudió Derecho en Asunción. Ramón sentía calor y estaba en calzoncillos. Su suegro les había dado para vivir una casa vieja y sin luz eléctrica. Ramón también escribía poemas. Decía que, si él poseyese trescientos mil pesos, podría marcharse a Buenos Aires para hacerse conocer como escritor. Al día siguiente, que era Domingo, Adela limpiaba la casa con ayuda de Paulina, una ahijada de la mamá de Adela, Matilde. Adela le enseñaba a salpicar agua al piso para que no levante polvo al barrer. Luego Adela se va a misa. Ramón lleva a su cuarto a Paulina y la empieza a manosear. En eso, llega doña Angela Gutierrez. El padre Rosales a Angela la había bautizado como La Babosa porque iba arrastrando chismes, como una baba, de aquí para allá, de casa en casa. Pregunta por Adela. Sale Paulina y le dice que se ha ido a misa. La Babosa le ve el pelo revuelto y le pide le traiga un vaso con agua. Cuando se va Paulina, mira por la ventana y ve la cama de dormir destendida y supone Ramón y Paulina son amantes. Se va rápido a la iglesia. Espera que termine la misa y habla con el sacerdote. Le dice vio acostados juntos en su cama a Ramón y Paulina. El sacerdote le dice que no repita secreto de confesión. El padre Rosales regresa a su casa y se encuentra en el camino con Ramón. Le cuenta le han dicho que tiene una relación con Paulina. Ramón le dice es mentira. Le pregunta quién le dijo eso. “Doña Angela Gutiérrez” le contesta. Luego se va Ramón. El padre Rosales llega a su casa y guarda su dinero entre sus libros. No lograba ahorrar mucho. Hacía veinte años, él era párroco en Asunción y se enteró que murió el párroco de Areguá dejando 500 mil pesos a su hermano. El padre Rosales se mandó mudar a párroco de Areguá pero no halló el secreto para hacerse rico.
Doña Angela Gutiérrez y su hermana Clara, viuda de Salcedo, habitaban una casa de estilo francés en Areguá. La casa había sido de lujo pero estaba descuidada. Don Desiderio Gutiérrez, el padre de Angela y Clara, murió a una edad avanzada, diez años después del esposo de Clara, que falleció a los cinco de casados. Don Desiderio fue poseedor de una gran fortuna, que gastó su dinero en mesas de juego, carreras de caballos y riñas de gallos. Cuando murió solo le quedaba la casa veraniega de Areguá. Siempre prefirió a su hija menor, Clara. Se creía que trataba mal a Angela porque se parecía a su esposa con la que nunca pudo entenderse, hasta el punto que vivieron varios años separados. Cirilo Salcedo murió del corazón a los 40 años de edad. Le dejó a Clara una casa que ella la puso en alquiler y recibía rentas. Clara era mujer caderona y bonita. Su criada Pilar le limpiaba la casa, le limpiaba el cuarto. Clara la vigilaba para que no encontrara el escondite de sus joyas. Angela limpiaba su cuarto. Clara recibió una nota por correo, una carta donde decía el cura la había nombrado presidenta de la comisión Pro Templo para adularle por sus terrenos y joyas. Su hermana Angela merecía más el puesto pero era más pobre. Por eso el padre Rosales no la eligió. Así decía la carta. Y terminaba diciendo: Una amiga que te quiere. Clara la mantenía a Angela, le daba dinero y le hacía firmar recibos. Doña Angela fue a visitar a casa de Adela y la encontró. Vio que la cama estaba tendida. Le contó que su hermana Clara le negaba el café con leche diario. Le daba solo agua. Adela le invitó desayuno. Doña Angela contaba puras mentiras y chismes mentirosos. Regresa luego a su casa de Clara y le dice Adela le invitó un café con leche muy rico. Quedan peleadas.
El doctor Eleuterio Brítez era abogado. Conversa con sus amigos sobre lo chismosa que es doña Angela. Hablan de la renuncia de dos ministros de Guerra, y el de Relaciones. Ramón regresó borracho y peleó con Adela. Ella se fue a su cuarto deshecha en llanto. Piensa en tomar el tren a Asunción al día siguiente. Ramón se acuesta y duerme. A la hora se despierta y va al cuarto de Paulina. La estrecha entre sus brazos. Al día siguiente Paulina, bien temprano, le sirve el desayuno a Ramón. Este le dice: “Ya te habían usado”. Luego se va a trabajar a Asunción. En el tren, piensa en su amigo Eudorito Marty que ha sido nombrado ministro. Quiere pedirle algún cargo. Llega al estudio de abogados de su suegro, don Félix Cardozo y le dice quiere renunciar y poner su estudio independiente de abogados. Don Félix le dice que un abogado joven necesita del prestigio de un abogado viejo. Debe hacerse una clientela. Le promete cuando sea más maduro Ramón, le conseguirá un consulado en Europa. Su suegro le dice tiene una audiencia, tiene que irse. Se despide y se va. Ramón se queda molesto y se va al Palacio de Justicia. Busca a Eudorito y lo hacen esperar. Pasa por allí, Willy Espinoza, el bibliotecario del Ministerio. Lo invita a esperar en la biblioteca. Conversan y Willy le dice: Eudorito si le pides un trabajo, no te lo va a dar. No te va a recibir, le dice. Dieron las doce y todos se van. “¿No te dije yo?”, le dice Espinoza. Ya ves que no le interesan tu saludo ni tus felicitaciones. Se van los dos a un café. Toman caña. Willy le dice: “Mi lema es con zorro, dos veces zorro; con un bruto, dos veces zorro; con un vanidoso, dos veces zorro. Siempre zorro. Hay que apoderarse de las personas con suavidad. Ponerles un freno sin que lo sientan y luego se maneja como uno quiere”. Ramón estuvo un rato charlando con Willy y luego regresa al estudio de su suegro a las tres de la tarde. Llegó Teodosio Anderssen. Le cuenta varias cosas de él y al final, le dice quiere pagar sus honorarios que le adeuda a don Félix. “Puedo dejarle el dinero a usted”, le dice. Y le da un sobre con cien mil pesos. Se va. Ramón al rato se marcha con el dinero. Se va en tranvía y se baja por una casa de juego. Entró a un café y se guardó bien sesenta mil pesos. Usará los otros cuarenta mil en apostar. Calculaba podía ganar doscientos mil pesos. Apuesta y pierde ochenta mil pesos. Le da mil pesos a Espinoza que lo ha visto y ha entrado. Sigue Ramón apostando y lo pierde todo. Espinoza apuesta montos pequeños, gana y pierde. Consigue ganar treinta mil pesos. Se van a la calle conversando. “Tu suegro te perdonará”, le dice. Le cuenta otro amigo, Martos, se jugó cincuenta mil pesos de su suegro y le dijo luego que se los había gastado por adelantado de la herencia que le tocaría a su mujer. Willy lo invita a dormir en su casa porque es de noche. Ramón acepta y van a su casa, iluminada solo con kerosene. Ramón duerme en el lugar de Espinoza, y éste se va a dormir con su amante Rosario a otro sitio. Al día siguiente, con el sol en alto despierta Ramón. Rosario puso a calentar el agua para el mate. Espinoza dice: “Dicen los nacionalistas que la yerba es el alimento número uno y que tiene más vitaminas que el café con leche, que es un alimento extranjerizante”. En eso pasa el tren de las siete de la mañana mientras conversan y desayunan. El ruido del tren hace temblar la casa de Espinoza que está debajo. Ramón se va luego. Espinoza espera a la tarde y llama al suegro de Ramón y le cuenta que Ramón se robó los cien mil pesos y los gastó en la ruleta. El dinero se lo dio un señor Anderssen. Espinoza lo llama de teléfono público. Luego corta. Don Félix, el suegro de Ramón llama por teléfono a Anderssen y le agradece el pago, con lo que confirma que Ramón de verdad le ha robado. Don Félix se va a Areguá al día siguiente. Encuentra triste a Adela. La consuela. Luego se encierra a conversar con Ramón. Le cuenta está enterado del robo. Le pide firme dos papeles. Ramón firma. La dice piensa instalar un Tambo en Areguá. Le dice: “Ocampito, que hace tres años se estableció con unas veinte lecheras en Ypacaraí, ahora tiene sesenta y gana lo que quiere”. Luego se va. Ramón derrama algunas lágrimas. Al día siguiente Adela habla con el padre Rosales sobre Ramón, y el padre le aconseja lleve su cruz. Ramón se dedica a emborracharse y al billar.
El abogado Eleuterio Brítez y su esposa son visitados por doña Angela. Ella acusa a su hermana de ser borracha. Luego de escucharla por largo rato, doña Angela dice vio a Ramón con Paulina teniendo sexo. El doctor Brítez la acompaña a doña Angela para ver desde donde vio la habitación de Ramón y Paulina, pero no se ve bien. Recuerda Brítez que un día que fueron al campo con la viuda Clara y su esposa e hijas de él, logró ver desnuda a doña Angela por unos segundos. Tenía buen cuerpo, le gustaba mucho a él. Una noche, el doctor Brítez sale de su casa y va a la casa de doña Angela y doña Clara. Sube al balcón de doña Clara y doblando un poquito la persiana la ve acostada con una prenda blanca. Se le ve parte del muslo y un busto. Ella se despierta y toma un anisado. Luego sigue acostada. El doctor Brítez piensa como está borracha puede abusar de ella y no opondría resistencia. Pero luego ella apaga la luz de la lámpara. El doctor Brítez se queda en la galería de su casa fumando. A la tarde siguiente, se encuentra en la calle el padre Rosales con Ramón. Lo invita a su casa. Le habla de Adela. Luego se queja del maltrato que le dio Ramón al caballo que le prestó, lo devolvió con sangre. Le avisan al padre Rosales que alguien lo busca. “Espérame”, le dice a Ramón. Y se va. Buen rato esperó Ramón. Miraba mohos en la pared y vio libros del padre Rosales. Encontró una Biblia, llena de billetes. Se roba diez mil pesos de la Biblia y se va. El padre Rosales se da cuenta del robo unos días después. Sospecha de Ramón y va a su casa. Entra y encuentra a la mamá de Paulina con su amante, sus hijos. Y le dicen Paulina está en el cuarto de casado de Ramón.

FIN Tomo 1

El padre Rosales le ordena a la mamá de Paulina que llame a su hija. La mujer se fue dentro y regresó diciendo que Ramón ya iba a venir. Viene Ramón con camiseta y pantalón de montar. Tenía los ojos hinchados y el pelo revuelto. El cura le dice viene por los diez mil pesos que le robó de su Biblia. Ramón le promete al día siguiente se los devolverá. El cura se va. Al día siguiente el cura espera a Ramón, pero no viene a pagarle. Lo busca a Ramón y Paulina le dice no vino a dormir. El cura va la comisaría y habla con el comisario Policarpo Arana. Le cuenta Ramón Fleitas le ha robado diez mil pesos. Arana supone que los cinco mil pesos que le ganó anoche en el juego a Ramón es del cura. Le promete que le hará devolver el dinero. Luego que el cura se va, Arana manda buscar a Ramón y entre ambos acuerdan que el asunto del cura no siga adelante. A los tres días volvió el cura donde Arana. Este le dijo había interrogado a Ramón que había negado todo. El cura no tenía pruebas. El cura se va molesto. Mientras tanto, el doctor Brítez iba varias noches a espiar la alcoba de doña Clara, la viuda de Salcedo. Un día hizo avisar a su criada que le avisara a la señora Clara que iba a visitarla. Fue a su casa y la encontró vestida con una larga bata blanca de encajes, con cintas azules. Deseaba abalanzarse sobre doña Clara, apretarla entre sus brazos, besarla; pero su timidez le agarrotaba la voluntad. Luego, el doctor Brítez le pregunta qué opinión tiene ella de su hermana. Doña Clara le dice que su hermana no la quiere. Le dice Angela criticaba a su papá. Don Desiderio tenía preferencia y mimos por Clara que era más cariñosa con él. Luego, el doctor Brítez le pide permiso para fumar. Ambos fuman. El doctor Brítez le pregunta por el pararrayos de su casa. Clara le dice las protege de las tormentas. También le cuenta al doctor que su papá, don Desiderio, le dejó todo en herencia a ella. Doña Clara le cuenta el ministro de Guerra, es su amigo, y puede dar fe toda la herencia es de ella. El doctor Brítez le dice puede subdividir sus terrenos de ella en Asunción y venderlos a largos plazos. El hará el proyecto y le calculará lo que puede ganar. Doña Clara acepta encantada. Le trajo los títulos de propiedad atados por un lazo. El doctor Brítez los recibe. En ese momento llega doña Angela. El doctor Brítez se retirar pensando: “¡Qué hembra! ¡Qué hembra! En la cama debe ser una fiera. Sería capaz de estar acostado con ella un año entero sin cansarme”. Luego de unos meses, el doctor Brítez se compró un libro titulado “Modelos de cartas de amor”. Le envió tipeadas a máquinas de escribir cartas de amor a doña Clara, firmando “un admirador”. Al día siguiente, de enviarle la carta, la visitaba. Pero a doña Angela le gustaba Quiñonez, un vecino maestro de escuela y pensaba que él era el autor de las cartas. Le fue bien con el negocio de las tierras al doctor Brítez. Las veces que visitaba a doña Clara, le llevaba planos con la división de los terrenos. Se inclinaban ambos sobre el plano y sus cabezas casi se tocaban. El doctor Brítez se iba muy contento. Un día, en la calle, doña Angela lo encontró al doctor Brítez y le dijo el caso de su herencia lo iba a dejar en manos de Ramón. Otro día, el doctor Brítez fue donde doña Clara para despedirse porque regresaba a Asunción. Ella le dio la mano y se despidió. El doctor Brítez salió a la calle y se encontró con Ramón. Le contó que se iba pasado mañana a Asunción. Le ofreció a Ramón le cuidase la casa, pero no lleve a Paulina. “Lo pensaré” dijo Ramón. Luego, después de dos días, el doctor Brítez se fue con su esposa a Asunción. Mientras, en todo Areguá se chismoseaba el robo de Ramón al padre Rosales. Doña Angela se puso a decir que lo del robo era una mentira del cura para perjudicar a Ramón, y que éste no le tocó ni un solo centavo. La idea de una publicación contra el párroco le había perseguido siempre a doña Angela. Junto con Rosalba, escribieron un artículo contra el padre Rosales y se lo llevaron a Bienvenido Quiñones, para que hiciese “correcciones de ortografía”. El artículo Quiñonez lo rehízo y lo publicó en un diario comunista de Asunción, firmado por “una católica de Areguá”. En el pueblo causó más sensación que un terremoto. Era un ataque fuerte y violento contra el padre Rosales. Este se derrumbó por dentro. Una inmensa fatiga física lo cogió al padre. Y quedó enfermo el padre Rosales.
Ramón se mudó a casa del doctor Brítez y se volvió compinche de Romualdo Paredes, el juez de paz. Ambos daban asesoría legal a los campesinos y les sacaban billetes, o sino algunas gallinas, algún chancho u otra retribución en especie.
Quiñónez también era amigo de Ramón. Conversaban sobre Rosalba y su esposo Salvado. Quiñonez dijo le habían contado Rosalba tuvo varios novios antes de casarse. Con uno de ellos quedó embarazada y tuvo que abortar de tres meses. Parece que Salvado se casó sabiendo eso. Luego hablan del padre Rosales. Quiñónez le cuenta que Salvado le ha contado el padre Rosales tiene cáncer y dos meses de vida. Un tiempo después, doña Angela se mudó a casa de su amiga Rosalba y su esposo Salvado. Rosalba y Angela tomaron la costumbre de hacer la siesta juntas en su cama de casada y conversaban de todo. Se hicieron grandes amigas. Un día Rosalba visitó a doña Clara para exigirle le diera su parte de la herencia a doña Angela. Doña Clara le explicó que su padre no dejó nada para Angela. También le dijo: “Lo que ella no me perdona es que me haya casado con Cirilo y que ella se haya quedado soltera”.
El doctor Brítez se enteró que Ramón había llevado a Paulina a vivir con él en su casa de Areguá. Fue a Areguá y botó a Ramón de su casa. Luego se dirigió al almacén de Teófilo. Este lo puso al corriente de las noticias de Areguá. Teófilo le contó él tenía ahorrados doscientos mil pesos. Le dijo le pensaba dar cien mil pesos para que los invirtiese en préstamos. El se contentaba con el 15% anual. “Te daré el 40% anual”, le dijo el doctor Brítez. Luego fue a visitar al enfermo padre Rosales. El cura le contó el robo de Ramón y las mentiras de la Babosa en su contra. Le contó pasaba los días leyendo los evangelios. El doctor Brítez fue a casa de doña Clara a visitarla. Hablaron de su hermana Angela. Clara le dijo que Angela siempre le había tenido antipatía. Pero desde que el padre Rosales la nombró presidenta vitalicia de la comisión ProTemplo, le tuvo verdadero odio. El doctor Brítez recordó a una prostituta que había conocido en su juventud y que se parecía a doña Clara. No podía pensar bien. Esos recuerdos no lo dejaban en paz. Luego le dijo a doña Clara: “Espero poder pasarle dentro de una semana más o menos un informe detallado de la marcha de nuestro negocio”. Luego se fue.
El padre Rosales murió diez días después de la visita del doctor Brítez. Un sábado, hacia las tres de la tarde, Ramón fue despertado por palmadas en la puerta de calle. Era Willy Espinoza. Ramón lo hace pasar y conversan. Espinoza le dice quieres instalar una fábrica de alfarería allí con capital prestado de Anderssen. Le cuenta Rosario, su amante, está más enferma. La traerá a que pinte alfarerías a Areguá. Le cuenta a su hija mayor la pusieron de doméstica en una casa y a la hija menor la pusieron en un orfelinato. Ramón le cuenta de su proyecto de irse a Buenos Aires a triunfar como escritor. Luego vinieron Arana y Paredes, se emborracharon con ellos y jugaron naipes. Estuvieron dos días así. Ramón le dice a Eudorito que seguro Eudorito lo despidió. Espinoza le dice que él renunció. Ramón le dice que defiende a doña Angela para que reciba su herencia de las joyas. Se calcula que valen un millón de pesos.
Pasó un mes y Espinoza seguía en Areguá. Ramón y él van a casa de Salvado a conversar con doña Angela. Allí hablan con Salvado también. Era una casa muy bonita. La farmacia le rendía bien a Salvado. Espinoza le recomienda a doña Angela se lleve bien con su hermana. En los días siguientes, Ramón se molesta con Quiñónez por haber puesto como autora de la publicación “una católica de Areguá”. Eso le traerá problemas a doña Angela y él necesita que esté de buen humor para que le pague a él. Quiere meterle bala a Quiñónez, le cuenta a Espinoza. Espinoza estaba acostándose desde hacía un mes con Pilar, la criada de las Gutiérrez. Espinoza se escondía entre los 20 árboles de banano que había junto a la casa de ellas. La llamó a Pilar y ella vino. Se acostaban en el campo. Luego, ella lo llevaba a su habitación. Esa tarde a Espinoza se le ocurrió la idea de robarle las alhajas a doña Clara antes de irse a Asunción. Durante varios días Espinoza estuvo planeando dicho robo que lo volvería rico y le permitiría ayudar a Rosario. El día escogido, Espinoza se sentó en el pasto de la calle junto a la casa de Ramón. Este le preguntó varias veces de donde sacó la ocurrencia de sentarse en el pasto. Espinoza oía fuertes los latidos de su corazón. Ramón se fue a dormir. Espinoza fue donde Pilar y entraron en la casa de doña Clara, que había salido. Espinoza revisó sus vestidos, y buscó las joyas por todo el cuarto, pero nada. Encontró botellas de anisado. Buscó en los cajones, en el colchón, pero nada. Buscó detrás de un cuadro y encontró una bolsita con las joyas. En eso, abre la puerta doña Clara. Espinoza la cubre con una manta y le golpea la cabeza con una botella de anisado que se rompe. Doña Clara se desmaya. Espinoza y Pilar huyen, se van en el tren hacia Asunción. A la media hora de haber sido golpeada, Clara se despierta, pero tiene alucinaciones. En la mañana, la campesina que le vendía la leche la encuentra y pide auxilio. Ramón y otros acudieron. Doña Angela también. Salvado venda a doña Clara la cabeza y dice es una pequeña conmoción cerebral. “¿No habrán robado las joyas?”, pregunta Ramón. Faltaba entre las personas Espinoza. Ramón sabía de sus amoríos con Pilar. “El fue” exclamó Ramón. Se hicieron cálculos y deducciones sobre la dirección que pudo tomar en su huida. Unos pensaban que debió cruzar el lago en cano para encaminarse a la cordillera; otros, que se había dirigido en caballo a Ypacaraí. A algunos les pareció más lógico que siendo de Asunción escapase por allí. Pero a nadie se le ocurrió pensar en el tren de la noche anterior. Doña Angela se entera de Clara que le han robado las joyas. El cuadro está caído y no está la bolsita con sus joyas.
Doña Clara le promete la mitad de la casa y la mitad de las tierras en Asunción a doña Angela si se queda y la cuida. Doña Angela se manda a mudar de nuevo con Clara. Rosalba se molesta con ella y se va con su marido a Asunción. Doña Angela vende los cosméticos de Clara, sus revistas pornográficas, y varios objetos personales de ella. Doña Clara toma veneno y grita de manera espantosa, doña Angela la encuentra gritando. Ve un papel donde dice doña Clara por culpa de Angela se mata. ¿Se morirá doña Clara? ¿Atraparán a Espinoza? Lean la novela.