Un lugar a donde ir
He terminado de leer la magnífica novela titulada “Un lugar
a donde ir” de la escritora española, María Oruña, abogada y escritora. La
novela narra la historia de los protagonistas, pero va del presente al pasado,
para recrear lo que sucedió antes. En Suances, un lugar de España, encuentran
un cadáver de una joven rubia y bonita en las ruinas de un antiguo palacio
derruido La Mota. Un señor jubilado que salía a pasear a su perro la encontró.
Valentina es la teniente de la policía que investiga el caso, porque en la mano
de la difunta los de la autopsia han encontrado una moneda antigua de los
tiempos de los reyes católicos. Vestía un vestido antiguo, y, al investigar
descubren que era polaca radicada en Alemania. Había viajado a España a dictar
un Congreso de Paleleología. Se llamaba Wanda Karsávina, y tenía doctorado en
Historia y Paleología. La teniente Valentina tiene su pareja que se llama
Oliver. Oliver está en la búsqueda de su hermano Guillermo que lleva
desaparecido muchos años. Logra averiguar que su hermano tiene una casilla
postal en Nepal, pero nada más, no logra averiguar más. En los momentos que la
novela regresa al pasado, narran que la Dra. Wanda conoce a cuatro señores exploradores
expertos en geología. Al lanzarse a una cueva desde paracaídas, uno de ellos,
el portugués, se golpea la cabeza y muere, cae en picada. No se abre su
paracaídas. Los tres restantes sí caen bien, se abre su paracaídas. Ellos hacen
amistad con Wanda. Paolo, el italiano, es el que se enamora de ella. Y pasan
los años, en varias oportunidades se encuentran Paolo y Wanda, son amantes.
Pero Paolo no la llamaba muy a menudo. Y Wanda quería una relación más seria.
Wanda se había conocido con ellos cinco años antes de morir. Regresando al
presente, los policías encuentran otro cadáver de un hombre en un pantano, con
una moneda similar a la de Wanda en la mano. No tiene agua en los pulmones, por
lo que deducen murió de paro cardiaco. Averiguan que era un ciudadano alemán.
Que tenía un alto cargo. Y luego encuentran otro cadáver de un español que
trabajaba en el museo donde hay las monedas de los reyes católicos. También se
le encuentra muerto con una moneda en la mano. Este ha muerto en la biblioteca
del museo, estrangulado según se dan cuenta. Los policías hablan con el
director del museo y éste les reenvía dos emails que había recibido del
fallecido español, en los cuales, uno va dirigido a Paolo preguntándole si ha
cogido monedas del cofre, del que tomó fotos porque han desaparecido cuatro
monedas. Y otro email va dirigido al director del Museo donde le avisa de la
desaparición de cuatro monedas de la colección, y que el único que las revisó
hace poco fue Paolo, el geólogo fotógrafo. Son los dos últimos emails que envió
antes de morir estrangulado. Oliver recibe la llegada de su primera esposa,
Anna Nicholls, la que luego del cáncer que derrotó se ha convertido en
activista de Lovelock, una institución de lucha ambientalista. Anna le cuenta
que ella tuvo una relación con su hermano Guillermo en la India. Oliver se
molesta con ella. Ella le dice que Guillermo se unió a su institución y la
visitó en el hospital donde ella estaba. Pero luego de una relación de un
tiempo se separaron. Anna Nicholls ha cambiado, se da perfecta cuenta Oliver.
Regresando al pasado, la noche del sábado anterior al asesinato de Wanda, ella
habló con Paolo, bailaron juntos y Paolo le propuso irse juntos a Hawaii, por
una semana, como luna de miel. Pero Wanda está molesta porque Paolo no la ha
llamado en meses. Le dice que no quiere una relación así. Regresando al tiempo
presente, la policía sigue investigando los asesinatos. Los forenses descubren
que habían untado con crema venenosa a Wanda, por eso había muerto. Le dieron
un masaje con dicha crema, que había en Sudamérica, pero también descubren que
había en la India. Oliver avisa que su ex mujer Anna Nicholls, se ha vuelto
radical. Busca con desesperación financiamiento para su ONG. Bueno, al leer la
novela descubrirán quiénes son los asesinos. ¿Será Paolo? ¿Quién será?
No hay comentarios:
Publicar un comentario